A principios del siglo XX, el médico austriaco Sigmund Freud revolucionó la ciencia con su teoría psicoanalítica cuando habló de la existencia de algo más allá de lo que se percata la mente a través de los sentidos, algo que permanece oculto en la sombra y que influye en la forma de actuar y de pensar. Si bien el concepto del inconsciente no fue de su invención, pues se tienen registros desde el siglo XVIII, la teoría desarrollada a partir de este sí es atribuible a él.

La bailarina y coreógrafa de danza contemporánea Charlotte Rodríguez Aguilar, en su pieza unipersonal “Shadow” (sombra), se sumerge a ese mundo interior claroscuro para crear un espectáculo que va más allá del movimiento del cuerpo al elaborar una narrativa a partir de sus recuerdos de infancia y sus vínculos familiares.

El título evoca la huella que deja una cosa o un suceso en el subconsciente y que acompaña el día a día, ya que la sombra es esa imagen oscura que sobre una superficie cualquiera proyecta un cuerpo opaco, interceptando los rayos directos de la luz.

Su proceso creativo va de la mano de la investigación de autores de culto como Alejandro Jodorowsky, Herman Hesse y del director teatral japonés Yoshi Oida, de quien abreva para el montaje de “Shadow”, bajo el auspicio del Programa de Estímulo a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA) 2022.

Revela que ha sido maravilloso reconocer en la pluma de estos referentes, aquello que también la habita y que ahora con esta pieza tiene la oportunidad de manifestarlo.

Charlotte busca que su interpretación trascienda el espectáculo, que alcance tal profundidad que su presencia deje de percibirse en el escenario hasta convertirse en una mediadora para que cada quien cree su propia experiencia estética a partir de sus vivencias y de lo que tiene oculto en su memoria; de sus sombras.

La metodología utilizada por Charlotte para la creación de “Shadow” está basada en el libro “El actor Invisible” de Yoshi Oida, que consiste en desarrollar los ejercicios propuestos por el autor -resultado de sus experiencias personales-, con el objetivo de alcanzar la observación minuciosa de la vida interna y externa, física e intelectual, para darle una dimensión psíquica al personaje.

El autor tiene como premisa la limpieza, ya que en Japón en todas las tradiciones ya sea teatral, religiosa o de artes marciales se lleva a cabo tal práctica.

El cuerpo también necesita prepararse, limpiarse y purificarse con agua para que el trabajo siempre vaya por buen camino.

Revela que la llena de entusiasmo que más de uno pueda verse representado en su narrativa corporal y para ello la acompañen en sus presentaciones los días 17 y 24 de junio a las 20:00 horas en el Centro Cultural Tapanco ubicado en la calle 47 por 68 Colonia Centro.