Los pasados días 16 y 17 de marzo se llevó a cabo el estreno mundial de la exposición “Hijo del Hombre”, del Museo de la Sábana Santa de Mérida, perteneciente al Instituto Superior de Estudios Guadalupanos Campus Mérida.

La exposición se realizó en Dzidzantún, Yucatán, e inició con una procesión organizada por la población del lugar. Llegaron a conocer a Jesús más de 2,500 personas provenientes del interior del Estado, así como de la capital y de otras partes de la República como San Luis Potosí, Quintana Roo, Campeche y Ciudad de México.

Debido a la cantidad de visitantes el evento tuvo que mantenerse abierto dos horas más para que todos pudieran acercarse a la escultura.

El escultor, Antonio Estrada Alamilla, fue ovacionado en múltiples ocasiones. Explicó que la imagen le costó más tiempo en planeación que en construcción, ya que requería tener todos los datos precisos para poder hacer una imagen de Jesucristo “sin meter mano artística”.

Entre llantos de sentimientos encontrados, cantos de alegría y rostros de sorpresa, con esta exposición, el Instituto Superior de Estudios Guadalupanos da inicio a una forma de evangelizar en Yucatán, donde se lleva a todos a un Jesús vivo: desde el vientre de su madre con las investigaciones guadalupanas, hasta su resurrección con el Museo de la Sábana Santa.

Todo esto evidenciado por certeza científica e histórica dentro de un mundo globalizado tecnológicamente, en el que las personas buscan entender y visualizar.

La primera vez que vi la escultura fue en casa de Antonio Estrada, tuve la oportunidad de mirarla prácticamente antes que nadie.

La primera sensación fue querer hincarme a orar, a pedir perdón, fue como un escalofrío que recorría todo mi cuerpo al percatarme que ese es el rostro de Jesucristo, según la ciencia.

Confieso que tuve una sensación similar al mirar a la Virgen de Guadalupe cuando estuve en su camerino, aunque, claramente son imágenes incomparables, una fue hecha directamente por Dios y ésta por la mano de un artista que Dios guió, no tengo duda.

Mirar una escultura nunca ha sido un pecado, son un recordatorio de un suceso o una persona tal y como tengo la foto de mi esposa en el celular. Lo que no es apropiado es rezarle a una imagen. En esta ocasión es una escultura que te recuerda qué hizo Jesús.

En el estreno, vi gente llorar, vi gente entender lo que hizo por nosotros, vi personas creer en Él por primera vez y por ello, con el corazón en la mano, invito a todas las personas a conocer esta escultura única en América y la cual tenemos el privilegio de tener en Yucatán: vayan a conocer el rostro de Cristo, no importa tu religión o tu denominación Cristiana: ¡Jesús es para todos!

¿Qué esperas para ver su verdadero rostro? La próxima exposición de la escultura del “Hijo del Hombre” será en el Centro Guadalupano de Mérida, el viernes santo a las 21:30 horas, en un oficio de velatorio.

Luego será el Domingo de Gloria en la reinauguración del museo, de 8:00 a 13:00 horas. Las actividades de la reinauguración podrá conocerlas por medio del Facebook ISEG Campus Mérida.