Que rico volver a la comida yucateca tras un delicioso tiempo de consumo de pastas. Ya estoy de regreso en nuestra bella tierra cargado de nuevas experiencias que me potencian para poder ser mejor para mi familia, mis pacientes y Dios.

Durante este viaje tuve tiempo de contactar conmigo y apreciar tantas cosas que no se tienen estando lejos de casa, en especial mi familia. También aprendí nuevas estrategias de comunicación, organización y administración, así como una nueva visión para el tratamiento de mis pacientes y el indispensable uso de los valores humanos dentro de cualquier empresa, sin ellos, el mundo está perdido.

Los valores humanos antes provenían de la formación en casa, pero ahora hay que verlo desde otra perspectiva, los podemos obtener en el trabajo, en el consultorio, o donde sea.

Los valores humanos provienen de la ética, el estudio de aquello que es bueno para todos y que sigue los principios biológicos y naturales, justo al igual que toda Iglesia Cristiana, ya que, justamente, todos los valores humanos se encuentran en Cristo, entonces, la visión de toda empresa, si contiene a los valores humanos, lo cual ya es indispensable, también contiene a Jesús. Otra experiencia inolvidable fue compartir estas semanas con líderes de 23 países diferentes, de América Latina, Asia, África y Europa.

Desde un ingeniero en Malaysia hasta el próximo presidente de Uganda. Incluso países que no conocía como Sri Lanka o culturas muy distintas a la nuestra como la china y la indú.

Cada una de estas personas compartió su visión de vida, de su liderazgo y sus valores humanos que ¡vaya!, resulta que, aunque todos somos de culturas y países diferentes, compartimos esos mismos valores humanos. Una vez que terminó el curso, el cual se llevó a cabo en las instalaciones del Vaticano, tuve la oportunidad de brindar una conferencia para hablar sobre Nuestra Señora de Guadalupe en una capilla frente a la plaza de San Pedro, posteriormente partí a un monasterio franciscano, donde conviví hasta llegar a la cocina con unos maravillosos seres humanos.

En dicho monasterio se encuentran las oficinas de la Pontificia Academia Mariana Internacional, organismo de la Santa Sede encargado de toda actividad que tenga que ver con la Virgen María. Con ellos tuve algunas reuniones y acordamos trabajar codo a codo.

Iniciamos, además, la organización de la visita del Presidente y el Secretario General de dicha Academia, ambos representantes del Papa, para verano del 2024 a nuestras tierras yucatecas. Además, participé en la grabación del programa especial de diciembre en Vatican News y Radio Vaticana.

Por último, pero no menos importante, tuve la dicha de visitar la ciudad imperial de Roma, la medieval de Asís y la renacentista de Florencia, ciudades cercanas y bellísimas con sus estilos propios. Agradezco a todas las personas que me apoyaron para que realice este viaje: a mi esposa Maricarmen, mi abuelo Fernando, mis padres y suegros.

A la veterinaria Denisse López, quien cuidó a mis mascotas, así como a la Dra. García y el Dr. Badal, que me apoyaron para que pudiera dejar el trabajo. Tengo dos agradecimientos más por hacer: a mi amiga Yamili Calderón, por postularme para esta beca, y a ustedes mis consultantes por su paciencia, ¡nos vemos mañana!