Laxantes… en el cine
Engordando a la vaca, columna de Juan Manuel González: Laxantes… en el cine
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El cine es un arte muy entretenido. Si sumáramos cuántas horas de nuestra vida nos la pasamos frente a una pantalla de cine, probablemente nos asombraríamos de la cantidad. Y sí, la verdad es que la experiencia vale totalmente la pena, siempre y cuando estemos en el ambiente necesario para hacerlo. Menciono esto porque es muy común en casos específicos que todos pasemos por situaciones en las que esta experiencia no se convierta en algo agradable. Expongo estas experiencias de una manera entretenida y divertida. Aquí te menciono 5 tipos de personas que son incómodas en el cine:
- El crítico profesional: Este personaje es el típico que empieza a opinar sobre las películas desde que llega al cine. Desde su recorrido por los pasillos viendo los posters promocionales ya tiene su opinión “profesional” de cómo va a estar la película. Ya no hablemos de la hora de los cortos, que una vez terminado cada uno de ellos, lanza su comentario de calificación al respecto.
- El Señor (a) Telenovelas: Esta persona es la que se mete tanto en la película que no puede dejar de comentar cada movimiento que los protagonistas realizan en las escenas. Llora, se ríe y comenta a volumen muy alto. Hace comentarios como: no entres ahí, te van a matar, pégale fuerte, etc. Podría decirte que incluso
- El repetidor: Cuando no eres fan de ir al cine solo, siempre hay alguien que te quiere acompañar, y este no es el problema. El problema viene cuando decides ir con alguien que ya vio la película y en su afán de emoción no deja de darte un codazo en el hombro y te dice: mira lo que va a suceder ahora. Como si tú no estuvieras poniendo atención a la película.
- El despistado: El despistado en sí, no es el que fastidia en las películas, pues la característica del despistado es que no entiende qué es lo que está sucediendo en la película o no entiende los personajes cómo están ligados. Esto provoca que el molestoso aquí sea el acompañante, pues tienen que estarle explicando cada cosa que sucede en la película y detallarle los parentescos que hay entre los personajes.
- El celulítico: Sobra mencionar que este individuo no deja de hablar en casi toda la película y no le importan las regulaciones de la sala. Esto es cuando te toca alguien en las filas de atrás, pero existen los que se sientan filas delante de ti y no hablan, pero andan mandando mensajes todo el tiempo y la luz que emiten sus teléfonos se vuelve enfadosa.