Palestina existe y esa es una realidad negada. Hoy, ante el recrudecimiento de la violencia en la Franja de Gaza y más allá, miles de opiniones simplistas y subvencionadas por los monopolios de desinformación masiva connotan a la resistencia palestina en general como actos de terrorismo y colocan en el papel de víctima al sionismo israelí, mismo que todos los días, y sí, sin equivocación, todos los días bombardea y asesina a ciudadanos palestinos en las calles que mantienen ocupadas desde hace mucho, sin que nadie grite a favor de las víctimas de un genocidio cometido a toda luz y con el apoyo irrestricto del imperialismo estadounidense y de las potencias europeas.

Palestina existe y hoy la mayoría de su territorio se encuentra ocupado por las fuerzas sionistas israelitas, negándole al pueblo palestino su derecho a vivir y su derecho a establecer las formas de Gobierno y sociedad que establece el derecho internacional para una nación reconocida, misma que la propia Organización de las Naciones Unidas avaló en aquella división territorial de 1948, donde ambas naciones quedaron estipuladas según los acuerdos y las resoluciones de entonces.

Palestina existe y los diferentes gobiernos sionistas de Israel no han dejado se establezca como debe ser la nación palestina, su guerra es irracional y cargada de un grado inhumano sólo visto durante el holocausto que el mismo pueblo israelí sufrió, y por ello es necesario preguntarse como lo hace el escritor cubano Luis Rogelio Nogueras, quien con su poema “Halt” (1979) reconoce el horror generado por los nazis y cuestiona a la sociedad judía al escribir: “Pienso en ustedes / y no acierto a comprender / cómo / olvidaron tan pronto / el vaho del infierno”.

Palestina existe y como nación, pueblo y cultura, tiene todo el derecho a establecer sus formas organizativas (políticas, económicas, religiosas, culturales, etc.) a lo largo de su territorio, mismo que como ya se ha mencionado ha sido reconocido por instancias internacionales, pero que desde hace décadas no se le reconoce por Israel, los Estados Unidos y demás naciones al servicio del interés imperialista, pues nunca cuestionan el genocidio que realiza el sionismo israelí en la Franja de Gaza ni alzan la voz pidiendo apoyo para el pueblo palestino. ¿Será que el cinismo es una forma inherente a Occidente?

Palestina existe y resiste, y esto último es lo que se condena hoy como ayer, pues la resistencia palestina lleva décadas manteniendo la dignidad ante el despojo de territorio y de las riquezas naturales, la explotación material de la zona por el interés imperialista y la expansión militar de las tropas de ocupación sionista demuestran que la expresión que observamos hoy no es una irracionalidad terrorista, sino el cúmulo del hartazgo y la toma de conciencia del pueblo palestino que se enfrenta a la violación de sus derechos como nación y como pueblo, porque además, la resistencia palestina no se reduce a Hamas, sino que va mucho más allá, en lo profundo de una negación que ha llevado a las generaciones que han nacido en la injusticia a hacerle frente ahora.

Palestina existe y es cierto que genera dolor mirar a los infantes estar en medio de una guerra que se les impone por el sionismo que no renuncia a su deseo de dominación y despojo, pero también duele mirar a diario la persecución, el asesinato y la violencia cometida por las tropas de ocupación israelí en territorio de la nación palestina, que únicamente lucha por su derecho a vivir. ¡PALESTINA EXISTE!