Lalibela, el santuario africano
Carlos Evia Cervantes; Lalibela, el santuario africano
Existe en Etiopía un lugar muy interesante a donde muchos de los cristianos ortodoxos de la región van en busca de una experiencia espiritual a través de la oración y la meditación. Se trata de 13 iglesias talladas en la roca del subsuelo y unidas entre sí por túneles también subterráneos. El sitio actualmente es conocido como Lalibela. Así lo publicó Fernanda de la Torre Verea.
El primer europeo que vio estas iglesias fue el explorador portugués Pedro de Covillana, pero fue el sacerdote lusitano Francisco Álvarez quien, en 1521, describió la grandeza del sitio y la llamó la Nueva Jerusalén. Este lugar mágico produce la sensación a los visitantes que el tiempo se detiene o, más aún, que han sido transportados al pasado, a los tiempos del rey Salomón, cuya historia tuvo una relación estrecha con este país, pues durante milenios gobernó su descendencia. Lalibela es la ciudad de peregrinación más importante de Etiopía.
En el siglo IV el monje sirio Frumencio llevó el cristianismo al país cuando estaba bajo el mandato del rey Ezana. Antiguamente, Lalibela era llamado Roha y estaba gobernado por la reina Judith, una temible guerrera, quien destruyó el cercano reino de Aksum. En el siglo XI el lugar fue conquistado por el rey Gebra Maskal Lalibela, de la dinastía Zagwe, quien le cambió el nombre. Este monarca dio la orden de construir los templos de piedra después de una visita que hizo a Jerusalén, en ese tiempo en poder de los musulmanes. Entonces quiso edificar una réplica de aquella ciudad. Durante los siglos XII y XIII esta urbe fue la capital de Etiopía.
La construcción de estas 13 iglesias pétreas tomó por lo menos de 25 años. Se estima que debieron haber trabajado más de 40 mil personas para lograr su edificación en este tiempo. La leyenda dice que los ángeles ayudaron en la construcción por la noche, duplicando el trabajo que los hombres hacían durante el día.
Los templos subterráneos más importantes son la Casa del Salvador del Mundo, que es la más grande del grupo y quizá sea la mayor iglesia cristiana hecha en un sólo bloque de piedra en el mundo. Otra es la Casa del Gólgota, donde dicen que Cristo se le presentó a Lalibela en una de sus visiones. La iglesia más conocida es la Casa de San Jorge, santo patrón de Etiopía. Lalibela fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1978 y sus templos están en pleno funcionamiento en la actualidad, concluye Torre Verea.
Entre las leyendas existentes se dice que aquí se guarda el Arca de la Alianza, cofre forrado de oro que guarda las Tablas de los 10 mandamientos. Cada 7 de enero se reúnen más de 60 mil peregrinos para celebrar el nacimiento de Cristo en este maravilloso lugar.