Antes que nada, una oración para todas las personas que viven en aquellos países que hoy están en guerra, bien dicen que el ser humano es depredador de sí mismo, y es lamentable que aún siendo una raza que razona, algunos no entren en razón y continúen un pleito a costa de sacrificar vidas ajenas, Dios con ellos.

Antes de que me ponga a llorar, aunque hay más de dos que están llorando en la política, como dirían los chavos de Marcelo, no vamos a estar hablando, pues ese está más extraviado que un coche en las calles de Chuburná. Sin duda, la polaca local se ha puesto intensa en los últimos días. La canción de Cri-Cri está más fuerte que nunca, en las últimas semanas han habido varios movimientos como el de los regidores del PRI que renunciaron, pero la Netflix ni lo diré porque la neta ni al caso.

Pasemos a los políticos de peso y no porque sea el “Gordito” Marín, peso político.

Hace unas semanas se anunció la salida del senador Ramírez Marín del PRI para unirse a la bancada del verde, que, sin duda, es un satélite más de Morena, como lo ha sido del PRI, del PAN. Mare, ese más que “Niño verde”, es “Niño camaleón” porque como cambia de color, pues le dieron la bienvenida a Jorge Carlos y con ello empezó la rumorología sobre si será el candidato para Gobernador, que si para la Alcaldía, o simplemente para reelegirse como Senador, cosa que parece que a más de dos no les pareció.

Pero hay movimientos que no te explicas y que con la experiencia del Senador no entiendes que tenga esas fallas, subió el telón de su salida el mismo día en que “Huacho” Díaz Mena se inscribió para ser el candidato a Gobernador, intentando con esto quitarle un poco de reflectores al registro del hijo de San Felipe, si resulta ser el candidato “Huacho” ¿este movimiento tendrá factura?, sólo el tiempo lo dirá.

Otro cambio que se venía venir, fue el que hizo el diputado Rommel Pacheco, quien se tiró un clavado con giro a otra piscina, dejando al PAN para unirse al equipo de Claudia Sheinbaum, sin duda los comentarios no se hicieron esperar en las redes, desde “chapulín”, vendido, traidor y demás sinónimos hacia el atleta hoy político, haciendo ver que es un malagradecido con todos aquellos que votaron por él, y ahora les da la espalda por perseguir sus intereses personales.

¿No cree usted amable lector que la palabra es importante en un ser humano? Se supone que todos estuvieron de acuerdo de los que querían ser candidatos a Gobernador por el PAN, habían acordado que el que quedará arriba de la encuesta sería el elegido y todos lo apoyarían, todos aceptaron las reglas, entonces ¿qué pasó Rommel?, tu palabra es tan frágil como tu trabajo como legislador, ya veremos quiénes más siguen brincando o como la veleta, girando para donde sople el viento. Esperemos que se acabe la lucha por los intereses personales y siga la estabilidad en seguridad en el Estado, porque sí preocupa lo que pasa con nuestros vecinos Campeche y Quintana Roo, masinó.