Mi madre siempre me dijo que la primera impresión es con la que se queda la gente. Esa primera impresión se puede dar de muchas maneras, pero lo que sí es un hecho es que crearse una reputación en la vida es un trabajo de disciplina y constancia de todos los días para poder lograrlo. Nuestro entorno está repleto de gente que sólo vende humo, sobre todo en las redes sociales. Algunos que se dicen expertos son buenos para las ideas, pero a la hora de aterrizar en el campo laboral o empresarial éstas no pueden hacerlo debido a la falta de experiencia, y ahí es donde nuestra reputación empieza a ceder terreno ante las personas. Te doy 5 puntos clave para lograr un nombre o reputación en la vida:

1.- Puntualidad.- Tanto en el cumplimiento de tus horarios con las personas, como en el compromiso de entrega de resultados, tienes que ser puntual. Las personas esperan en ocasiones ansiosas el día y la hora prometida para realizar la junta o la revisión. Cumple.

2.- Higiene.- Tu limpieza personal habla en primera instancia del tipo de persona que eres, cómo te arreglas. Pero también cuenta el orden en tu lugar de trabajo y en tu casa, incluso tu auto. Procura dedicar cada determinado tiempo a ordenar tus cosas para dar buena impresión.

3.- Profesionalismo.- Las formas son de igual importancia que los fondos, sobre todo al momento de entregar resultados. El cumplimiento de objetivos y metas debe hacerse de manera profesional, incluyendo los tiempos de entrega. Da siempre lo mejor de ti.

4.- Proyectos sociales.- Tu participación en proyectos de ámbito social o de ayuda al prójimo siempre será bien vista, sobre todo cuando sea de corazón y no nada más por contar con una aprobación. Recuerda tus inicios, y verás cuánta gente te apoyo.

5.- Preparación.- El tiempo que le dediques a capacitarte para obtener nuevos y mejores conocimientos te mantendrá en el nivel que exigen tu profesión y tu persona. Transmite estos conocimientos a la gente que te ocupa y lograrás crecer de manera firme.

Jugar limpio es de extrema importancia para mantener tu reputación como alguien con el que es interesante realizar negocios. No tires por la borda lo ganado, porque la misma reputación se pierde en segundos.