Selección de gazapos
Felipe Escalante: Selección de gazapos
SECRETOS OCULTOS. Recientemente se efectuó en Londres una exposición de joyas de la familia real. Antes esas alhajas estaban bien resguardadas y no se exhibían al público. Un periódico local tituló la noticia de esa exhibición como “Ya no hay secretos ocultos”. El título que comentamos incurre en una redundancia al usar una palabra innecesaria para comprender la oración. Veamos por qué. El Diccionario de la Lengua Española define la voz “secreto” como lo que cuidadosamente se tiene reservado y oculto, es decir, en el significado de “secreto” incluye el concepto de oculto; si el secreto no es oculto, ya no es secreto. En ese título hay una inútil repetición de conceptos, bastaba con escribir “Ya no hay secretos” para entender la frase.
INVENCIBLE. En la sección deportiva del mismo diario se informa de un interesante encuentro de box: un púgil local de peso pluma expondrá su cetro juvenil avalado por el Consejo Mundial de Boxeo. Su rival será otro gladiador apodado Pastelero, “invencible luego de nueve peleas”. A ver, a ver. Según el DEL, invencible es que no puede ser vencido. Pero, el retador en ese combate no es invencible, aunque no haya sido derrotado en nueve peleas. Lo real es que después de nueve enfrentamientos ese boxeador se mantiene invicto, nunca vencido, triunfador o victorioso, vocablos éstos que pudieron utilizarse en lugar de “invencible”. Aquí tenemos un vicio de redacción llamado impropiedad, por emplearse una palabra con significado distinto al que realmente tiene.
GAZAPO PERIODÍSTICO. La publicación diaria que comentamos trae un artículo dedicado a una grave enfermedad y como subtítulo de esa noticia dice: “Es mujer uno de cada diez casos de lupus eritomatoso”. Sin embargo, en la información respectiva leemos: “Se sabe que es más frecuente en mujeres, pues nueve de cada diez personas con lupus son féminas”. En fin, ¿es una mujer de cada diez enfermos de lupus, o nueve mujeres por cada diez pacientes? Bonita contradicción. Ese yerro no vulnera las reglas de la gramática española, pero es un auténtico gazapo periodístico, un error que se comete inadvertidamente al hablar o escribir. Esto ocurre con frecuencia en las redacciones de los periódicos cuando, por las prisas por terminar la edición, el redactor no revisa sus escritos. Por la abundancia de ejemplares hoy empleamos el tirahule con efectos de butsbiltsón (buts´bil ts´oon)* y mucha pólvora. Salen fuertes pedradas hacia los gazapos y las tres piezas caen a tierra. A pesar de que traemos nuestro sabucán más grande, éste queda hasta el tope. Con la talega llena concluimos la expedición cinegética. Hasta el próximo tirahulazo.
*Rifle en lengua maya.