Hablar de don Víctor Cervera es hablar del PRI, porque hace unos días habló en forma pública el Ing. Herbé Rodríguez Abraham sobre don Víctor Manuel Cervera Pacheco. Creo que hablar de don Víctor Cervera es sinónimo de política, porque hay un antes y un después de Cervera en la historia de la política en Yucatán;fue dos veces gobernador del Estado, la primera de forma interina en 1984 y por elección en 1995, secretario de la Reforma Agraria, presidente municipal de Mérida, diputado federal, diputado local, dirigente estudiantil y un gran visionario que tenía como doctrina principal el trabajo que da resultados.

Hombre que a pesar de los años de haber partido a la escena eterna aún siguen muy firmes su vida y su obra y dando frutos para un Yucatán que avanza, como la Universidad del Sur, el Complejo Deportivo la Inalámbrica, haber triplicado el número de planteles del Cobay, el Palacio de Cristal y la Terminal Remota del Puerto de Progreso, que tantos frutos sigue dando, a pesar de ser una obra tan criticada por detractores, y donde hoy a la distancia los resultados le dan la razón a don Víctor. Faltarían hojas para poner todo lo que es la obra de gobierno de don Víctor Cervera.

Por eso lo que dice el Ing. Herbé de una persona ausente simplemente es sinónimo de cobardía, porque las cosas se dicen de frente y no en la ausencia. No sé cuál sea el motivo de tales declaraciones, pero basta con caminar el Estado para escuchar tantas muestras de cariño hacia la persona del líder de Dzemul; cariño con cariño se paga, por eso la gente lo quiere, porque demostró con su trabajo por Yucatán cuánto quería don Víctor al Mayab. Hoy unas palabras necias no manchan la vida y obra de un gran hombre, porque las voces que lo reconocen son más. Decía el Quijote que cuando los perros ladran es señal de que se está avanzando, y hoy la obra de Cervera sigue haciendo que avance Yucatán; por eso don Víctor Manuel Cervera Pacheco está más presente que nunca, masinó que sí.