Arena playa, los colores que suman
Si hay algo que enoja al ciudadano de a pie, ese que mira desde su espacio sin mayor participación que el gozar o resentir las decisiones...
Si hay algo que enoja al ciudadano de a pie, ese que mira desde su espacio sin mayor participación que el gozar o resentir las decisiones que toman los gobiernos en turno, es la pasarela de colores en los edificios públicos, como parques y centros deportivos, cada cambio de gobierno.
Pues bien, en el municipio de Playa del Carmen se ha tomado la acertada decisión de aplicar colores apartidistas en los espacios públicos, se ha comenzado a transformar con el color “arena playa” que da al clavo con la nueva campaña de promoción y nombre del octavo municipio de Quintana Roo.
Ya comenzamos a ver los espacios pintados con ese color neutro, agradable y limpio, el color “arena playa” que relaja a la vista y acaba con los tonos brillantes y chillantes de la administración pasada. Es parte de la estrategia de posicionamiento y nueva imagen del gobierno de Estefanía Mercado, además de las distintas obras que se realizan en toda la ciudad y municipio de Playa del Carmen.
Esa limpieza en espacios públicos, además de los edificios del palacio municipal, se mira igual en el municipio de Benito Juárez Cancún, cuyo inmueble que ocupa el palacio municipal luce un tono blanco, limpio.
En dicho inmueble se recibe a ciudadanos de todos los rincones del municipio, quienes se sienten atendidos, escuchados y con los temas que exponen resueltos por parte de la presidenta municipal Ana Paty Peralta. Tales acciones en ambos municipios sin duda suman al bienestar ciudadano y abonan a la atención directa que brinda la gobernadora Mara Lezama.
No podemos decir lo mismo del municipio de Tulum, donde el panorama cambia completamente y su presidente municipal Diego Castañón pasa por un momento que pondrá a prueba la credibilidad y aceptación real que tiene en el pueblo, sobre todo ahora que grupos ciudadanos han anunciado que a partir de este miércoles colocarán mesas para recabar firmas y pedir la revocación de mandato de Castañón.
Si bien Castañón no es precisamente santo de la devoción de muchos de los tulumnenses, los más recientes hechos delictivos que acabaron con la vida del secretario municipal de Seguridad Ciudadana, han prendido la mecha, mecha que podría ser cortar, apagarse rápidamente sin mayores consecuencias, o muy larga y generar un incendio mayor en el cual más de uno podría salir chamuscado.
Así las cosas en los gobiernos municipales que apenas van por sus primeros seis meses, y en los cuales las mujeres van a la delantera, claro a excepción del sur de la entidad donde los hechos nos hacen pensar que es un caso perdido. Hasta la próxima.