Clases de arte
Desde que tengo memoria he visto mamás que en la época de exámenes de sus hijos suspenden todas las actividades extracurriculares de los infantes...
Desde que tengo memoria he visto mamás que en la época de exámenes de sus hijos suspenden todas las actividades extracurriculares de los infantes con la excusa que para darles más tiempo para estudiar y que no se distraigan. Respeto mucho la decisión, pero en esta etapa es cuando más deberían de ir por lo menos a las clases que tienen que ver con el arte.
Me refiero a la clase de pintura, la de teatro la de algún instrumento musical, la danza entre otras. Yo estoy seguro que tomarse este descanso es innecesario. El cerebro desarrolla habilidades que ninguna materia fuera del arte proporciona. Una clase de un instrumento musical proporciona entre otras cosas lo siguiente: Iguala el nivel de los dos hemisferios cerebrales. Facilita el aprendizaje de las Matemáticas y esas materias que catalogamos como difíciles.
Cambia el nivel de motivación personal y el control de stress. Es un gran facilitador en el proceso de aprendizaje de la Lecto – Escritura. Surge una reveladora ampliación de la memoria Espacial – Temporal. Aumento de la capacidad motriz. Significativo incremento de la Auto Estima. Efectivo aprendizaje para desarrollar trabajos en grupo. Acentuación en los reflejos. Enseña a obtener absoluta concentración en cualquier circunstancia.
Y puedo seguir escribiendo beneficios, pero el espacio no me alcanzaría. Las actividades artísticas están arraigadas al desarrollo del ser humano desde su nacimiento y constituyen una recompensa cerebral natural necesaria para el aprendizaje. La práctica de cualquiera manifestación artística lleva asociada un componente emocional que motiva y permite contemplar el mundo que nos rodea desde una perspectiva diferente, más estética, más profunda.
La Educación Artística resulta imprescindible porque permite a los alumnos adquirir toda una serie de competencias socioemocionales básicas para su desarrollo personal y que, además, les hacen más felices. Y ese es el verdadero aprendizaje, el que los prepara para la vida. El cerebro humano, que es un órgano complejo en continua reestructuración, agradece los retos y necesita el arte. Esto de chico no lo sabía, ahora cuando escucho a una mamá decir que va a cancelar clases no sé cómo decirle el daño que va a provocar. Así es que cancelen todo menos el arte. Hasta la próxima semana.
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