México cuenta con ‘amortiguadores’ provenientes de fondos de estabilización, reservas internacionales
y la línea de crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI) para enfrentar turbulencias financieras en 2018 como un desplome en los petroprecios y la plataforma petrolera, la depreciación del peso o, incluso, que se abandone el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Para mitigar los riesgos fiscales el país cuenta con los recursos del Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP) para afrontar eventualidades, como puede ser la caída de los precios del petróleo, los cuales ascienden a 196 mil millones de pesos, pero la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) estima que cerrarán el año con 200 mil millones de pesos.

También se tiene el Fondo de Estabilización de los Ingresos de los Estados (FEIE), que reporta recursos por 42 mil 718 millones de pesos y que Hacienda puede entregar a estados y municipios para compensar la caída de las participaciones federales que reciben como parte de los recursos de la venta de petróleo.

A estos fondos deben añadirse los recursos de la Línea de Crédito Flexible del FMI, por 88 mil millones de dólares, y las reservas internacionales del Banco de México, por 172 mil 985 millones de dólares, de acuerdo con el último reporte del banco central.

Estos recursos “representan una protección contra potenciales turbulencias financieras”, señaló Hacienda en los Criterios Generales de Política Económica 2018. El gobernador de Banxico, Agustín Carstens, destacó durante la presentación del reporte trimestral del sistema financiero, que el país cuenta con una línea de crédito flexible del FMI y con coberturas cambiarias del petróleo que dan confianza al
sistema financiero.

Ernesto O’Farrill, presidente de Bursamétrica, consideró que el precio del petróleo ha ido en aumento y eso es por el acuerdo global de mantener congelada la producción petrolera en países de la OPEP, que se puede extender a finales de 2018, por lo que es factible que su valor se sitúe en 48.5 dólares por barril (dpb) en promedio el próximo año.

“El tamaño de las reservas internacionales y la línea de crédito nos dan suficientes recursos. Adicionalmente, Banxico hizo un lanzamiento por coberturas por 20 mil millones de dólares, de los cuales apenas se van a usar seis mil millones, en un momento grave, puede poner más dólares y eso puede amortiguar la especulación”, señaló el experto.

Los diputados elevaron a 48.5 dólares la estimación del precio del crudo para 2018, desde los 46 dólares que propuso el Ejecutivo.

Vanessa Rubio, subsecretaria de SHCP, dijo el miércoles pasado a senadores que en el caso de que no se alcance en 2018 el precio del petróleo de 48.5 dólares por barril propuesto por diputados, se tiene la estrategia de coberturas petroleras y los fondos de estabilización, con casi 200 mil millones de pesos por primera vez.

Este año, se espera que el precio se sitúe en 43 dólares por barril y en 2018 en 48.5, no obstante, este nivel sigue 53 por ciento por debajo del nivel de 2012, de 102 dólares. Miguel Messmacher, subsecretario de Ingresos, mencionó que en caso de que el precio del crudo no se situara en 48.5 dpb el próximo año, “entrarían los fondos de estabilización, tenemos facultad de usar esos fondos”.