¿Cómo afectaría a las empresas el aguinaldo de 30 días?
La Coparmex reprochó que aumento al salario mínimo, las reformas pensionarias y el incremento de los días de vacaciones; han implicado costos adicionales para las empresas.
Ante la propuesta de que se duplique el aguinaldo de 15 a 30 días para los trabajadores mexicanos, la iniciativa privada y especialistas señalaron que la iniciativa traería consigo afectaciones al sector empresarial, principalmente a las Mipymes, además de representar posible presiones inflacionarias en costos laborales para México.
“La reforma de aumentar los días de aguinaldo impactaría de manera negativa especialmente a las Mipymes, que representan más del 95% de las empresas del país”, aseveró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), por medio de un posicionamiento.
Víctor Gómez Ayala, director de Analítica de Datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), aseguró que, de aprobarse esta iniciativa que el jueves pasado avanzó en comisiones del Senado, las empresas tendrían más presiones en sus gastos, lo que impactaría directamente en los precios de los bienes y servicios que ofrecen.
“Al ser una medida general que afecta sobre todo a las empresas que operan en los canales formales de la economía, tendrías una presión adicional en el costo laboral que puede incidir sobre los precios a los que venden las empresas en los mercados”. El directivo del IMCO también enfatizó que dentro de los riesgos inflacionarios previstos por el Banxico se planteó los potenciales costos laborales, por lo que “este tipo de iniciativas podrían generar esa alza en la inflación que señala el Banco”.
Sofía Ramírez Aguilar, directora general de México Cómo Vamos, acotó al respecto que “es difícil estimar el incremento en el cual esto podría traducirse, sin embargo, terminará por afectar al consumo en el país”.
Rodolfo de la Torre, director de Movilidad Social en el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), señaló que el incremento del aguinaldo de dos a cuatro semanas de remuneración, sumado a lo que ha ocurrido en el pasado con la aportación para las pensiones, más el aumento en los días de descanso, entre otros, se está hablando de que, en algunos casos, las empresas pueden llegar a tener aumentos de alrededor del 15% en sus costos laborales.
“Esto no sería problema si la productividad del trabajo estuviera en aumento y los costos se compensan con una mayor productividad para las empresas. Desafortunadamente, la productividad promedio en la economía en los últimos años ha sido negativa y cada vez por trabajador se genera menos PIB”, detalló con relación a las estimaciones de gasto empresarial.
De igual manera, Ramírez indicó que esto tendría un valor diferenciado, acorde al tamaño de los negocios, pero, aun así, las micro y pequeñas empresas serían las más afectadas.
“Es una medida que va a tener un impacto diferenciado, pero sí se va a encarecer la transición a la formalidad de las micro y pequeñas empresas, de las cuales el 65% de ellas tiene un grado de informalidad”. En ese sentido, la Coparmex advirtió que, de aprobarse la propuesta del senador Napoleón Gómez Urrutia, podría haber el riesgo de un repunte en la informalidad laboral y una disminución del número de contrataciones.
Sugieren estímulos fiscales. Por su parte, Sofía Ramírez apuntó que “con este tipo de propuestas tendrías que hacer esquemas en donde hubiese algún tipo de compensación sobre todo para aquellas micro y pequeñas empresas que quieren transitar a la formalidad y que haya algún tipo de subsidio, es necesario que se revise qué implicación podría tener incluso en términos fiscales”.
Por su parte, la Coparmex reprochó que “todas las medidas (como el aumento al salario mínimo, las reformas pensionarias y el incremento de los días de vacaciones) han implicado costos adicionales para las empresas y no han sido acompañadas de incentivos que promuevan la creación de empleos formales; el aumento en la productividad; el emprendimiento; o apoyo para las micro y pequeñas empresas”.
A propósito, la directora general de México Cómo Vamos subrayó que duplicar el aguinaldo representaría para los trabajadores formales recibir, en términos netos, un ingreso extra del 4%. Ramírez también alertó que, al hacerse dicho aumento, también dirigido para los trabajadores del Estado, el Gobierno deberá medir el impacto en las finanzas públicas.
¿QUÉ TANTO HA CAMBIADO EL MUNDO DEL TRABAJO DESPUÉS DE LA PANDEMIA?
La pandemia marcó un antes y un después en el mundo del trabajo. Los colaboradores no son los mismos, las prioridades tampoco, y la gestión de talento enfrenta nuevos retos. “El entorno ha cambiado, somos más sensibles al tema de salud, finanzas y replantear estilos de vidas. Las empresas han visto ajustes en los ecosistemas laborales y su oferta de valor”, afirma Martha Hernández, directora de Consultoría en Capital Humano de AON México.
La pandemia y su impacto en el trabajo se tradujo en sobrecargas laborales y jornadas de trabajo más extensas, además, la implementación improvisada de nuevos modelos de trabajo exhibió liderazgos inadecuados. De acuerdo con un estudio de OCC Mundial, el 46% de las personas asegura trabajar más horas que antes de la emergencia sanitaria.
“El colaborador se planteó muchos análisis y buscan satisfacción alrededor de su vida que quizá antes no se habían puesto como prioridad. Los trabajadores están laborando con aspiraciones que antes no tenían”, señala Martha Hernández.
Este escenario está moldeando una nueva manera de percibir el trabajo y lleva a las personas a tomar decisiones que en contexto previos a la pandemia eran impensables. El informe “La revolución invisible” de PageGroup evidencia que el 36% de los mexicanos rechazaría un ascenso si el nuevo puesto afectará su salud mental.
“La compensación salarial siempre estará presente, pero ya no es el principal factor. Lo que impulsa a las personas ahora es el propósito, su impacto, el aprendizaje o el proyecto en el que estarán. Las organizaciones necesitan profundizar en la experiencia del empleado, qué quieren los colaboradores”, apunta Francisco Briseño, socio líder de Workforce Transformation de PwC México.
Si bien el salario se mantiene como una prioridad en la búsqueda de empleo y la permanencia, especialmente después de un contexto de alta inflación, la pandemia también impulsó otros satisfactores en la fuerza laboral. Esto se ha manifestado en mayores tasas de rotación y la antesala del fin de las carreras de largo plazo.
El estudio Market Research 2024 de Pandapé destaca que al menos seis de cada 10 empresas perciben que la estabilidad laboral está en declive. Éste fue el cambio más radical que identificaron las compañías en el último año; un 51% indica que la rotación creció más de lo habitual.
Pero la transformación no sólo se refleja en lo que buscan las personas, también las empresas. Francisco Briseño subraya que después de la emergencia sanitaria, la demanda de nuevas habilidades como la adaptación al cambio o el liderazgo son más buscadas por las compañías.
Con la digitalización de las empresas –acelerada por la emergencia sanitaria– la demanda de nuevos perfiles también es una nueva realidad. “Los trabajadores están conscientes que necesitan capacitación para no quedarse obsoletos, porque la tecnología no cambia cada 10 años, cada dos o tres años hay nueva tecnología que tienes que aprender a utilizar”, afirma el especialista.
Trabajo híbrido, la nueva normalidad. Una de las transformaciones más visibles en el mundo del trabajo son los nuevos esquemas laborales. Con las medidas de confinamiento por la Covid-19, el teletrabajo pasó de ser un beneficio a la única opción para continuar con el negocio.
“El tema del home office tenía muchos años de haberse implementado en otros países, y en México era algo sólo de algunos sectores. La pandemia provocó que casi de un día a otro fuéramos capaces de trabajar a distancia, eso no se puso en duda. Y también se comprobó que podíamos tener comunicación a distancia, y aprovechamos más los medios tecnológicos”, expone Martha Hernández.
El teletrabajo no ha desaparecido del todo, pero el interés por recuperar la colaboración física y la demanda del talento por conservar la flexibilidad alcanzada con este esquema han encontrado su punto de equilibrio en el trabajo híbrido, la nueva normalidad.