Creando una política industrial se podría aprovechar el nearshoring

Para que México pueda sacar toda la ventaja posible de la relocalización de empresas para acercarse...

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Para que México pueda sacar toda la ventaja posible de la relocalización de empresas para acercarse a su mercado potencial, tendencia conocida como nearshoring, es importante que tenga una política industrial y una estrategia de innovación que la acompañe, aseguró Francisco Cervantes Díaz, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).

En la clausura de una serie de seminarios organizados por el Instituto para el Desarrollo Industrial y la Transformación Digital (INADI) para tratar el tema, el empresario refirió a otras voces que aseguran que no se aprovecharon completamente las oportunidades del extinto TLCAN por no tener una política industrial activa. 

“La mejor forma de aprovechar el nearshoring es a través de la implementación de una política industrial integral que contemple de manera coherente todas las alternativas del Estado, como educación, financiamiento, Estado de derecho, seguridad, infraestructura y, sobre todo, agilización comercial”, remarcó Cervantes. 

La Confederación de Cámaras Industriales de México (CONCAMIN) ha insistido en la necesidad de impulsar una política industrial, la cual, de la mano con la relocalización de cadenas de producción, harían que el Producto Interno Bruto (PIB) nacional crezca a cuatro por ciento o más de 2024 a 2040. 

José Abugaber, presidente del organismo industrial, manifestó en días pasados que trabajan con la Secretaría de Economía (SE) en la construcción de una política industrial que permita incrementar la producción y modernizar la planta productiva con los elementos de la industria 4.0 a fin de contribuir en el desarrollo económico equilibrado en todas las regiones del país. 

Sin embargo, Francisco Suárez, exembajador de México en Canadá, quien también participó en los seminarios del INADI, aseveró que, aunque la nueva política industrial en México se está logrando, se tiene que aterrizar, ya que hasta el momento todo se ha quedado en retórica. 

René Villarreal, presidente del Centro de Capital Intelectual y Competitividad, coincidió en que se requiere pasar en México de una política pasiva a otra proactiva, creando infraestructura necesaria y apoyo a las empresas para su integración a las cadenas productivas y la fábrica regional en América del Norte. 

En este sentido, Arturo Oropeza, presidente del INADI, enfatizó que varios actores, ellos incluidos, han luchado por más de una década en la creación de una política industrial integral, por lo que ponerle atención en estos momentos es positivo. 

“Desde Estados Unidos hay una decisión de regresar a una política de fomento industrial. Esto es muy importante. No nada más son más inversiones, no son más plantas, es una política industrial que tuvimos durante cerca de 50 años y que hoy está cambiando”, expuso el experto durante el seminario. 

Explicó que el fenómeno del nearshoring tiene un potencial para los próximos 10 o 20 años, lo que implica que no desaparecerá de no atender rápido los problemas; no obstante, reconoció que dependerá del talento que se pueda ofrecer para acapararlo. 

En este punto, Suárez hizo énfasis en que se requiere una acción proactiva del Estado con políticas que lo impulsen y eliminen las barreras, tales como la falta de Estado de derecho, violación de tratados, una infraestructura saturada en la frontera norte, violencia, inseguridad y problemas en la política energética. 

Bajo todo este panorama, el presidente del CCE puso sobre la mesa a las autoridades económicas del país la creación de un Comité para proponer y evitar errores que impidan esta tendencia de atraer nuevas cadenas de suministro a fin de aprovecharlo en todo lo posible. 

BREMBO INVIERTE 207 MILLONES DE DÓLARES PARA AMPLIAR SU PLANTA EN ESCOBEDO, NUEVO LEÓN.

Brembo, líder en diseño y producción del sistema de frenado de alto rendimiento, anunció la expansión de su planta ubicada en el parque industrial GP Escobedo, donde invierte 207 millones de dólares, con ello, espera duplicar la capacidad de producción de calipers a seis millones de piezas. 

El CEO de Brembo en Norteamérica, Stéphane Rolland, comentó, "vamos a duplicar la capacidad de la planta con esta inversión", y aún cuando hay automatización de algunos procesos, las máquinas son operadas por técnicos. 

Al doblar el espacio y la capacidad de producción se habilita para la siguiente generación de tecnología, con el personal de Brembo, dijo en conferencia de prensa. 

Durante la inauguración, señaló que "la expansión de la planta de Escobedo aumenta en gran medida la capacidad de Brembo para servir a nuestros clientes de América del Norte. A medida que Brembo continúa avanzando en el mundo de los frenos, instalaciones avanzadas como esta ayudan a hacer realidad nuestra visión lo que representa otro paso en nuestra misión de ser un proveedor de soluciones y servir a nuestros clientes a nivel mundial". 

De acuerdo con un boletín de la empresa, "ahora en pleno funcionamiento, la expansión de Escobedo de 30,000 metros cuadrados (322,917 pies cuadrados), duplica la producción de Calipers de aluminio, desde la fundición hasta la fabricación y el ensamblaje, creando 500 nuevos empleos hasta 2027, en este proceso". A la fecha cuentan con 1,500 empleos en la planta de Escobedo. 

La empresa italiana se expandió de una empresa conjunta en Puebla en 1996, a la adquisición de las operaciones de componentes de frenos de Hayes-Lemmerz en 2007. Hoy Brembo opera de forma independiente tres instalaciones en México: la planta de calipers en Escobedo, la fundición de hierro fundido Escobedo y la planta de mecanizado de discos en Apodaca.

 

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