La designación de la ombudsperson representó un proceso largo y complicado. Pero se logró. La XVII Legislatura del Estado votó por unanimidad a favor de Omega Istar Ponce Palomeque, quien rindió protesta como titular de la Comisión de los Derechos Humanos de Quintana Roo, por un periodo de cuatro años, a partir del pasado lunes 11 de diciembre de 2023. Empezó la transición administrativa y está despachando.

Dicha elección se realizó luego de aprobar el dictamen que contenía la lista de las 12 personas aspirantes a la presidencia. Se tuvo que elegir a fuerza de entre esos 12 perfiles que figuraban en el dictamen de la legislatura anterior, sin posibilidad de poder descartar. Se actuó de buena fe si se presume que la XVI Legislatura hizo su trabajo con rigor al respecto.

"En el sentir de los diputados, elegimos a la persona que reúne los requisitos debido a los 19 años de experiencia en diversas áreas de la Comisión de Derechos Humanos y también por su profesión como sicóloga clínica. Ahora esperamos que la Comisión funcione bien, porque cumplimos en tiempo y forma", explica Guillermo Brahms, diputado presidente de la Comisión de Derechos Humanos, uno que permaneció activo e informando sobre la evolución de los procedimientos para mantenerlos a salvo.

Los desafíos están a la vista: además de la revisión obligada tras dos años sin una conducción titular y de temas estrictamente administrativos (para atacar rezagos y dar seguimiento a investigaciones en curso), retomar el diálogo con las asociaciones civiles, volver a la mesa de los temas propios con la población y fortalecer la proximidad con los comités ciudadanos, son asuntos impostergables.

Asimismo, la capacitación y la profesionalización son prácticas básicas, como lo son consolidar la autonomía y la imparcialidad. La promoción, la difusión y la observancia deberán desarrollarse bajo esas premisas. La prevención de las violaciones de los derechos humanos se trabaja siempre, sí o sí, de la mano con las autoridades. Involucrarlas de lleno es un compromiso de las partes involucradas.

Omega Ponce conoce la institución y su dinámica, ha enfrentado ya esos retos en zona norte y zona sur, porque ha sido encargada, coordinadora y jefa en la estructura organizacional de un organismo importante como este, para toda la sociedad.

Inicia su tiempo. El fin último es convertirse en un organismo realmente garante de los derechos que le dan su nombre, sin demora ni pretextos.