La desaparición de la Gran Comisión en el Congreso local, o al menos el sistema de operación político y económico es de extrañarse en el poder legislativo, de ahí que ya se considera devolverlo, claro bajo el nombre de Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo).

Y es que la desaparición de la Gran Comisión fue siempre la bandera de campaña de los diputados opositores en ese momento al Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Quintana Roo, sin embargo en toda la XV Legislatura, la que dominó el PAN, no se realizó cambio alguno y fue hasta la XVI cuando entró en operaciones el nuevo esquema.

Pero que cada fracción parlamentaria presidiera un año la Jugocopo, es decir, compartir el poder, no fue algo que funcionara y se creó una parálisis legislativa en el primer año de la legislatura que termina, año que lo presidió la ahora panista Reyna Durán y que, dicho sea de paso, su única preocupación fue ejercer a su favor el poder que le significaba el cargo.

Qué decir del paso de Gustavo Miranda, del PV, por el mismo cargo, y ahora concluye el PAN con Eduardo Martínez Arcila.

Ahora se pretende que la presidencia de la Junta de Gobierno y Coordinación Política dure los tres años de la legislatura, con lo cual se anticipa un nuevo enfrentamiento entre los legisladores con mayoría para presidirla, pues significa el control del dinero y poder ni más ni menos que por tres años, como en los mejores tiempos del PRI.

Si bien se pretende instalar la idea que la próxima presidenta de la Jugocopo será Marybel Villegas, lo cierto es que en política nada está dicho, además que serán los nuevos legisladores de las distintas bancadas quienes tendrán la autonomía para elegir a aquel o aquella que presidirá la Junta.

Pero además, los diputados morenos y aliados van con la consigna de aterrizar de una vez por todas los programas y lineamientos de la 4T en Quintana Roo, y en ese contexto y de aplicarse al pie de la letra, no hay cabida para intereses personales.

Los diputados morenos tendrán la responsabilidad de cumplirle al pueblo, sobre todo porque se anticipa carro completo para el partido guinda y aliados, de ahí que el nivel de compromiso con los ciudadanos es mayor por el grado de simpatía y expectativas que generan.

Una muestra son las más recientes encuestas en las que Mara Lezama aparece con 27 puntos arriba de su más cercana contendiente rumbo a las elecciones del 5 de junio, posicionamiento histórico en la vida política de la entidad. Hasta la próxima.