El río revuelto llamado Morena

Lo menos que se puede decir de lo que ocurre en Morena en el preludio a la elección de quien será la abanderada...

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Lo menos que se puede decir de lo que ocurre en Morena en el preludio a la elección de quien será la abanderada (o) a la gubernatura de Quintana Roo, es que las pasiones se han desbordado y promete intensificarse el grado de descomposición al interior de ese partido.

Si bien los actores políticos, los cuatro que quieren la candidatura (Mara Lezama, Marybel Villegas, José Luis Pech y Luis Alegre), se han mantenido en silencio sin descalificación alguna hacia alguno de sus oponentes internos, grupos al interior de Morena en el sur de la entidad han convocado a conferencia para pronunciarse a favor de Marybel Villegas y Rafael Marín, estrategia que seguramente se mantendrá y que pretende ejercer presión a la hora de designar candidato (a).

En un primer momento se dijo que este viernes 10 de diciembre se elegiría al abanderado, ahora ya se rumora que el plazo se alarga a finales de diciembre, y con ello se prolonga la agonía de los aspirantes y sus colaboradores, quienes tendrán una Navidad sobresaltada por cualquier posible anuncio de definición en la cúpula del partido guinda.

Pero en la entidad también se renueva el Poder Legislativo, es decir, a los 25 diputados locales, 15 de mayoría relativa y 10 de representación proporcional.

No es un secreto que los legisladores, aquellos que concluyen su primer período, se han avocado a trabajar en su posible reelección, sin embargo, ese propósito no se ve nada fácil en ninguno de los partidos.

En Morena esa posibilidad se ve muy complicada para los legisladores, porque la mayoría se dedicó a trabajar para sus intereses y no por los de los ciudadanos que les dieron su voto, lo que generaría que su partido los haga a un lado, mientras que en la oposición se dificulta por la poca credibilidad que tienen en el electorado y el crecimiento exponencial de Morena en Quintana Roo.

Pero además todo indica que el año concluirá y en el Congreso local quedará un tema pendiente y que tiene que ver con el derecho de las mujeres a definir sobre su propio cuerpo, entiéndase la despenalización de aborto.

Si bien se han ingresado nuevas iniciativas en la XVI Legislatura relacionada con el tema, no se ha conocido avances en su análisis o posible fecha para que sea dictaminado en comisiones y posterior votación en el pleno, lo cual hace pensar que será otro de los pendientes del año y se trasladará al 2022 con la posibilidad que sea enviado a la congeladora porque los partidos políticos y diputados se ocuparán más de los procesos internos que de legislar.

Estamos pues a menos de un mes del inicio del proceso electoral y a partir del 7 de junio no habrá nada que importe más en Quintana Roo que la sucesión gubernamental y mantenerse en la jugada. Hasta la próxima.

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