Ahora todos abandonan el barco a la deriva y a punto de hundirse llamado Partido Acción Nacional (PAN), para sumarse al equipo ganador sin tener, al menos así se mira desde afuera, derecho a pretender que se les reciba con los brazos abiertos.

Y es que es muy fácil sumarse a un proyecto ganador cuando ya todo el trabajo está hecho, cuando ya se ganó por amplia mayoría en urnas, con el fin de pretender continuar en el cargo, pero bajo las siglas de alguno de los partidos en el poder.

Dicen los que saben que esa es precisamente la intención de Atenea Gómez Ricalde, presidenta municipal de Isla Mujeres, quien se mantuvo muy cómoda en el PAN, mientras gobernaban y de ninguna manera se deslindó en la campaña electoral pasada que concluyó con las elecciones del 5 de junio pasado.

No, el deslinde y la salida del PAN se dan ahora que ese organismo político está desaparecido y es porque se quiere subir al barco ganador de la 4T, reelegirse en el 2024 y seguir en el poder.

Claro que esa intención no es bien vista por muchos que consideran no ha hecho méritos para pretender sumarse a la 4T y, lo que es peor, reelegirse en Isla Mujeres.

La única puerta que podría tocar Atenea es la de Morena, porque en el PV ya tienen candidato para Isla Mujeres y se dice es Juan Carrillo, el diputado federal.

De no lograr el apoyo de Morena ni de sus aliados, Atenea Gómez tendrá que buscar otra opción y el plan “B” sería Movimiento Ciudadano (MC), partido por el cual tiene un panorama aún peor en urnas.

Como se ven las cosas, la presidenta municipal de Isla Mujeres habría jugado mal sus cartas al dejar al Partido Acción Nacional, sin haber concretado su posible ingreso a las filas del partido guinda.

Atenea Gómez se habría lanzado al vacío sin red, ya que, como dije, no es lo mismo sumarse a un proyecto en pleno proceso electoral que cuando ya se es gobierno.

Otro  que también saltó al tren de la 4T hace algunas semanas fue el presidente municipal de Bacalar, José Alfredo (Chepe) Contreras, con lo cual la escuálida oposición en la entidad se queda prácticamente sola y solo tendría un gobierno en firme, el de Lilí Campos Miranda en Solidaridad.

Los neo simpatizantes de la 4T no han entendido que sumarse no es sinónimo de ocupar un espacio de manera inmediata, sobre todo cuando en Morena y aliados hay una larguísima fila de aspirantes que esperan su turno para ir por un cargo de elección popular. Hasta la próxima.