La presidenta municipal de Benito Juárez, Ana Paty Peralta, encabezó los operativos para que los transportistas respeten la tarifa autorizada, la semana pasada, cuando los choferes (empujados por sus dirigentes) subieron el precio del servicio sin aviso ni permiso, una medida que fue calificada “un abuso” por la ciudadanía. Los detalles son de conocimiento público.

El gobierno local reaccionó para proteger a las familias usuarias del “golpe al bolsillo”, de la violación a la ley y de los amagos de chantaje en torno a un posible paro. No es la primera vez que Ana Paty pone mano firme para que se respeten el Estado de Derecho, los acuerdos y las condiciones de convivencia pacífica con ciertos grupos.

Cabe recordar algunos ejemplos: la noticia de cuando movió a los taxistas para destrabar un bloqueo a la zona hotelera, cerca del aeropuerto, dio la vuelta al país. La afectación a la imagen del destino era inadmisible por un capricho.

En otra ocasión confrontó a la concesionaria de agua para que resolviera la falta y la insuficiencia de suministro en Cancún y le exigió un programa de descuentos

En otras oportunidades canceló la concesión del antiguo relleno sanitario y anda tras Óptima Energía (OE) para que renueve con puntualidad la iluminación, entre algunas más que han merecido el reconocimiento de la sociedad. Son asuntos que necesitan voluntad y firmeza, no sólo asumirlos como “un deber”.

En el fondo, se asumen como “batallas” y deben ganarse, aunque debe aclararse: la administración 2021-2024 siempre ha preferido el diálogo, los acuerdos y los consensos, y no tolera los golpes por la espalda como ocurrió en días recientes. Los argumentos son claros: antes de pensar en ajustar el tarifario, debieran arreglar las unidades en malas condiciones para ofrecer un servicio digno. Nada ni nadie por encima de la ley.

Ana Paty lo ha dicho: un gobierno humanista, que trabaja por el bienestar y la justicia social, no cederá a las maniobras agresivas que alteran el orden, perjudican a las familias y condicionan el servicio. Esta “batalla” también se gana, aunque sigan las “pataletas”.

Es un breve recuento de las problemáticas que reflejan un modo correcto de abordarlas y darles tajante solución.