Es apertura, no debilidad

El camino se allana progresivamente conforme avanzan los procesos de entrega-recepción...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Ha sido una etapa política de incertidumbres y suspicacias, pero el camino se allana progresivamente conforme avanzan los procesos de entrega-recepción. Y eso debe destacarse en un contexto de confusión inducida o natural. 

Inducida, porque ciertos personajes de los grupos que pronto gobernarán continúan exigiendo más revancha que justicia, ni terminan de irse los que huyen despavoridos dejando caos tras de sí. Natural, por ese clima propio de la alternancia histórica.

A nivel estatal, la reciente reunión entre los gobernadores en función y electo, Roberto Borge y Carlos Joaquín respectivamente, reactivó las emociones en sus partidarios, así como en ciudadanos inconformes, quienes ya piden pruebas del cambio prometido. Y verlos juntos motivó tanto sospechas como condenas.

Pero no debió ser así. El diálogo y las imágenes del encuentro –ahora sí hubo– evidencian asuntos no menores lejos del morbo con que miran los espectadores ávidos de gresca. Por ejemplo -y es lo más básico de todo-, que siempre sí pudieron sentarse para iniciar el proceso pese a los pronósticos adversos, y en los tiempos anunciados con antelación.

Que si fue en Cancún y no en Chetumal (sede del Poder Ejecutivo), habrá sus motivos de agenda o de logística, que de ninguna manera restan formalidad, legalidad o legitimidad a lo que ambos consideraron el arranque formal. Las voces más críticas querían verlos en un ring, como si eso marcara el multicitado cambio, pues.

¿Era eludible la cita? Tal vez sí. De hecho, los dos han nombrado a los coordinadores de sus respectivos equipos para agilizar la tarea. ¿Y para qué evitarla? Ambos muestran madurez, apertura y diálogo, no debilidad o temor. Ni en las democracias más carentes, ni en las transiciones más esperadas, ha habido ausentes.

Lo anterior no significa, subrayaba el gobernador electo, que acepte la situación que guarda esta administración saliente, tan sólo abre las puertas a la revisión, la auditoría y la rendición de cuentas. Deberá probar, en todo caso, lo que ha supuesto durante varios años, y actuar en consecuencia.

En tanto, Borge manifestó: “Por nuestra parte, nos sometemos al escrutinio, no sólo del equipo de transición, sino de los ciudadanos que lo requieran por medio del Instituto de Transparencia”, justo cuando esas mismas voces acusaban la “desaparición” de dicho organismo.

Si desarrollan las reuniones periódicas antes del 25 de septiembre darán “tranquilidad” a quienes ven abandono, perdón y olvido donde aparentemente no los hay. Aun así, no se trata de eso: muchos han olvidado que los servidores públicos se deben a ciudadanos y no a militantes, seguidores ni patrocinadores.

La reunión debió celebrarse porque fue institucional, de apertura, respetuosa en tiempos y formas, lo que pocos auguraron; o mejor dicho, lo que no pocos intentaron frustrar, ignorando con ello a una inmensa mayoría que está pidiendo más seriedad en los temas públicos.

Es una nueva etapa a la que están convocados no sólo políticos, también ciudadanos interesados, empresarios, académicos y de otros tantos sectores para consolidar una misma idea: construir un mejor Quintana Roo. Es una oportunidad imperdible.

Desorbitado

La naturaleza nos pone a prueba por estas fechas casi todos los años, pero estamos preparados, en algunos municipios mejor que en otros. Durante los últimos años se ha fortalecido esa cultura cívica que sorprende al mundo y de la que aprenden los recién llegados.

Al respecto, los absurdos que no faltan: algunos pidiendo el azote del huracán como “tiro de gracia” a las administraciones salientes; y otros de la misma calaña, me aseguran, rogando por lo mismo para obtener un fondo de emergencias. Es el colmo.

Lo más leído

skeleton





skeleton