Con el pretexto de difundir sus “acciones legislativas”, los diputados locales que anhelan dar el salto a alguna candidatura en 2018 han emprendido una campaña intensiva en redes sociales utilizando publicidad pagada para tomar ventaja en la carrera electoral que iniciará formalmente a mediados de diciembre, aunque los corredores ya están en la pista.

En Facebook, la madre de todas las redes sociales, los insertos publicitarios de los diputados suspirantes han inundado los muros de los usuarios quintanarroenses en los últimos días, con videos, imágenes o fotografías donde hablan maravillas sobre su propio desempeño.

La inversión de cada uno de los diputados es difícil de calcular, pero se puede inferir quienes son los más interesados en promocionarse por la cantidad de veces que aparecen sus anuncios pagados en la popular red social.

Y los que encabezan la ofensiva publicitaria son el panista Fernando Zelaya Espinoza, quien tiene en la mira la candidatura a la alcaldía capitalina, y la priista Leslie Hendricks Rubio, que está abierta a las posibilidades, aunque los rumores la colocan como aspirante a la presidencia municipal de Cancún.

En el caso de Leslie Hendricks, ha difundido unos clips de entrevistas en los que habla un poco de todo, aunque basa su mensaje en los asuntos atendidos por la Legislatura, con la finalidad de darle legalidad a dicha publicidad.

Por su parte, Fernando Zelaya está enfocado en promocionar su primer informe de actividades legislativas, aunque por supuesto, el trasfondo es de mercadotecnia política.

Pero si bien este par de diputados son los más “adelantados” en la lucha por posicionarse rumbo al 2018, otros también están haciendo su luchita en las redes, aunque con menor derroche.

En las últimas dos semanas diputados como el independiente Juan Carlos Pereyra Escudero, la panista Mayuli Martínez Simón y el perredista Emiliano Ramos Hernández, también le echaron unas monedas al Facebook para inflar su popularidad.

Y es que amparados por la flexible ley electoral que les da la posibilidad de difundir sus acciones legislativas, y sin una regulación clara de la promoción política en redes sociales, los diputados están aprovechando el momento para venderse ante la población, aunque muchas veces la estrategia les resulta contraproducente, pues las redes son una zona libre donde los ciudadanos vierten sin filtro su enojo contra los políticos, causando el efecto contrario.

A pesar de ello, la publicidad en redes se ha convertido en la herramienta predilecta de los suspirantes, por lo que en las próximas semanas tenga usted por seguro que los veremos hasta en la sopa.