El primer año del gobernador
La detención de los implicados en el quebranto de las arcas estatales es indispensable.
El gobernador Carlos Joaquín González cumplió este 25 de septiembre su primer año en Palacio de Gobierno, y dos victorias legales llegaron envueltas para regalo en el arranque de esta semana. Por un lado, la captura de Felipe de Jesús Castillo Meseta, cercano colaborador del exalcalde de Solidaridad y excandidato priista a la gubernatura, Mauricio Góngora Escalante. En otro frente de batalla, a Juan Pablo Guillermo Molina –ex Secretario de Finanzas y Planeación– se le negó un amparo para evitar ser sometido a juicio político.
La lentitud en el desahogo de las denuncias en contra de ex funcionarios acusados de saquear las finanzas públicas es uno de los puntos que genera mayores reclamos de los quintanarroenses, para quienes no basta con contemplar tras las rejas panameñas al despreciado ex gobernador priista Roberto Borge; exigen un destino similar para sus compinches y dentro de esta lista de peces grandes Juan Pablo Guillermo Molina y Mauricio Góngora Escalante están en lo más alto.
Para “el gobierno del cambio” la detención de los implicados en el quebranto de las arcas estatales es indispensable para legitimar las acciones gubernamentales; por esa razón la lluvia de denuncias no ha cesado, aunque las detenciones se cuentan con los dedos de una mano.
Pero la red está extendida para lograr una pesca gorda en el arranque del segundo año del gobierno, y la mira está puesta en Mauricio Góngora Escalante y en el escurridizo Juan Pablo Guillermo, quien ya desamparado está en las manos de la Comisión de Justicia del Congreso local.
No será PAN comido, porque los peces gordos se mueven muy por debajo de la superficie y a menudo se esconden en cuevas lejanas para eludir a sus captores, pero los pescadores de la alternancia prometieron arponearlos y están obligados a cumplir, sin descuidar la consolidación del plan de gobierno de Carlos Joaquín, cuyos principales colaboradores han acudido al Congreso local para la glosa del informe.
El reclamo de justicia y la recuperación del dinero desviado no deben eclipsar el desempeño de funcionarios que no se deben escudar en los excesos del pasado borgista para justificar su incompetencia y falta de resultados, lo que incluye a los tres presidentes municipales que fueron depositados en sus sillas por la ola del cambio joaquinista; Luis Torres Llanes (Chetumal), Cristina Torres Gómez /Playa del Carmen) y la rebelde panista cozumeleña Perla Tun Pech.