De la mano y muy ordenaditos, haciendo a un lado sus diferencias políticas y rencillas habituales por el color de sus partidos, los ocho diputados federales quintanarroenses han conformado un frente común para atender diversos temas de coyuntura, entre ellos la defensa del presupuesto estatal para 2018, aunque han dejado en el tintero otros reclamos urgentes de la sociedad que siguen en su lista de pendientes olvidados. 

Desde hace un par de semanas nuestros legisladores federales lanzaron a las redes sociales un video en el que hacían gala de unidad “por el bien de Quintana Roo”, en el que no aparecieron la diputada perredista, Ivanova Pool Pech, y la desconocida diputada del Verde, Paloma Canales, aunque después se sumaron a la causa. 

Porque esta semana todos los diputados federales de Quintana Roo trabajaron en conjunto en una reunión con el gobernador Carlos Joaquín González y la mesa directiva de la Cámara de Diputados, con la intención de lograr un presupuesto más justo para el estado el próximo año.

Nuestros ocho representantes respaldaron al gobernador en la solicitud de minimizar los recortes para la entidad, principal generadora de divisas por su dinámica turística en el país. Además, en bloque también se plantaron en la Cámara Baja para exigir la comparecencia del Procurador de la República por el asunto del aseguramiento de cajas de seguridad de una empresa de Cancún que tiene en la incertidumbre a más de mil familias. 

Aquí los portavoces de este embate de los diputados fueron el priista José Luis “Chanito” Toledo Medina, y la perredista Ivanova Pool Pech, pero en el posicionamiento estuvieron juntos, como equipo, los diputados Carlos Gutiérrez García (Panal), Mario Machuca Sánchez (PRI-PVEM), Sara Latife Ruiz Chávez (PRI), Paloma Canales (PVEM), Arlet Mólgora Glover (PRI) y la panista Patricia Sánchez Carrillo.

Pero esta positiva unión circunstancial no se ha reflejado en la atención de temas de amplio interés público, como el cambio al horario tan rechazado sobre todo en el sur de la entidad y la reducción a las tarifas eléctricas, entre otros temas prioritarios.

Ya veremos si esta unidad multicolor y el repentino impulso de trabajar en equipo es una emoción pasajera alentada por la cercanía de 2018, o si en verdad se trata de lograr beneficios significativos para la población. Ahí está el reto, y los estamos observando.