El PRI se desinfla
La crisis del Tricolor en Quintana Roo se ha convertido en una pesadilla interminable.
La crisis del Tricolor en Quintana Roo se ha convertido en una pesadilla interminable. Cuando por fin se vislumbraba un aliento de esperanza para su resurgimiento, el desprendimiento de importantes cuadros con sus respectivos grupos de seguidores inconformes con el reparto del pastel electoral hacia las coaliciones rivales compromete las posibilidades de triunfo, incluso en los municipios donde son gobierno.
El éxodo de priistas no ha parado desde la noche triste del 5 de junio de 2016, fecha en la que perdieron por primera vez en la historia la gubernatura del estado, lo que hizo caer al ex partidazo en un tobogán hacia el abismo.
En todos los municipios las deserciones han sido masivas. En la capital, las huestes de Eduardo Ovando partieron con rumbo a Morena a probar suerte, y aunque Efraín Taleno Canul –su ahijado político– no fue favorecido con la candidatura a la alcaldía, cada vez más ovandistas se ven haciendo activismo en el partido propiedad de AMLO.
En la zona maya la sangría de militantes del PRI ha sido brutal, aunque se ha recrudecido de forma exponencial en los últimos días.
En José María Morelos, después de que el alcalde José Baladez Chi declinó a su derecho de buscar la reelección, se desató una cruenta contienda interna entre Soledad Flota Medina y Rossana Romero Ávila que terminó con el ungimiento de la segunda como virtual candidata.
Pero Soledad Flota no quedó conforme con la transparencia del proceso y decidió recoger sus canicas para irse a jugar a la acera del Frente, sumando el apoyo de su amplio grupo de simpatizantes a la candidata perredista Sofía Alcocer, esposa del Secretario de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, Pedro Pérez Díaz.
En Felipe Carrillo Puerto ocurre algo similar, pues priistas inconformes con la actual alcaldesa, Paoly Perera Maldonado, han empezado a integrarse a las estructuras del ex priista José Esquivel Vargas, quien está a punto de recibir la bendición formal del PRD como candidato de la coalición oficialista “Por Quintana Roo al Frente”.
Sin capacidad de costurar las cicatrices en el tiempo que resta para la batalla electoral, la misión del PRI de al menos mantener su parcelita de cuatro municipios luce imposible, ya que los momios están en su contra en José María Morelos, Felipe Carrillo Puerto e Isla Mujeres, y solo en Tulum mantienen posibilidades porque las coaliciones rivales no perfilaron rivales de peso para darle pelea al cacique Marciano Dzul Caamal.