Impacientes por su partida
La comunidad universitaria está de lo más impaciente porque el rector de la Universidad Autónoma de Quintana Roo...
La comunidad universitaria está de lo más impaciente porque el rector de la Universidad Autónoma de Quintana Roo (Uaqroo), Francisco López Mena, deje la rectoría de la máxima casa de estudios; tan es así, que ni siquiera están dispuestos a esperar a que fenezca su mandato, el próximo 16 de agosto del presente año.
Ya le pidieron su renuncia, pues una serie de sucesos acontecidos en los últimos días acabó con la poca paciencia que le tenían a este, que consideran un personaje poco grato o un político con gris actuar.
Y no es para menos, pues el incendio en la máxima casa de estudios inició cuando López Mena hizo varios anuncios que molestaron a más de un estudiante y profesor de las cuatro carreras que quiere desaparecer.
No sólo eso, sino que, además, anunció sus planes de demoler el edificio del Centro Cultural Universitario que se encuentra en el pleno centro de Chetumal, entre la avenida De los Héroes y 5 de Mayo, para convertirlo en una plaza comercial.
Allí, los estudiantes acudían para realizar sus actividades extracurriculares como aerobics, tae kwon do y piano, entre otras, pero que, encima, ese edificio tiene un valor histórico y cultural para los chetumaleños, y fue entregado a la Universidad como un edificio para que pueda hacerse de recursos propios, y no depender tanto del gobierno.
Ante tales anuncios, ¿Qué esperaba el señor rector? ¿Que nadie dijera nada? ¿Que estudiantes y maestros no se quejaran? Porque así lo hicieron, y protestaron frente a rectoría para exigir que el rector dé marcha atrás con todas esas arbitrariedades, pues la universidad no le pertenece en lo absoluto.
La manifestación tocó los filamentos más sensibles de López Mena, y de inmediato arremetió contra ellos, tal y como lo hicieron del conocimiento de la sociedad chetumaleña y quintanarroense, en sendos comunicados en los que la comunidad estudiantil detalla, con pelos y señales, el violento actuar del rector.
Los alumnos y ex alumnos detallaron que en una reunión, posterior a la manifestación, el rector López Mena se portó de la forma más violenta, alzaba la voz constantemente dejando ver su falta de conocimiento para el manejo de conflictos.
En palabras del alumnado: “El no quería el diálogo, quería intimidar y arremeter por habernos manifestado libre y tranquilamente”.
Por lo que, desde ese momento, lo desconocieron como rector, no por coraje, no por represalia, sino porque simplemente una persona así no puede estar al frente de la que se conoce como la máxima casa de estudios del estado, el alma mater de los quintanarroenses que hoy están forjando los destinos del estado.
“Esperamos su renuncia lo más pronto posible y, de la manera más pacífica, le solicitamos que el tiempo que permanezca, evite tomar decisiones absurdas y vengativas en contra de Docentes, Alumnos y Administrativos. Nosotros somos esta alma mater, no tú, "López Mena", escribieron los estudiantes.
Si bien López Mena ya dijo que no buscará la reelección, ya demasiado daño le ha causado a esta universidad, cuyos estudiantes sólo quieren aprender, y los docentes enseñar, y él lo único que quiere es acabar con el prestigio de la máxima casa de estudios en Quintana Roo.
¿Llegará López Mena al término de su mandato?