Alcaldes, pendientes y reelecciones

El año ha iniciado y con ello la carrera en el proceso electoral, tanto local como federal, está más que arrancada...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

El año ha iniciado y con ello la carrera en el proceso electoral, tanto local como federal, está más que arrancada, pero en una sociedad informada lo fundamental no es lo que los futuros candidatos prometan, sino lo que los ciudadanos tienen que exigir a sus representantes, por eso, en este primer tiro del año, lanzamos, desde aquí, algunas interrogantes.

Y aunque pudiéramos (no lo haremos) en este espacio dedicarnos a cuestionar las vinculaciones políticas o su futura vía para contender por la reelección, como en el caso del alcalde de Isla Mujeres, Juan Carrillo Soberanis –a quien la detención del ex gobernador Roberto Borge Angulo le ha calado muy hondo, pues a él le debe toda su corta trayectoria–, o los alcaldes neoaliancistas de Bacalar y Lázaro Cárdenas, Alexander Zetina y Emilio Jiménez, respectivamente, que intentan acercamientos con el actual gobernador, Carlos Joaquín González, pero en el proceso tienen que competir contra él; mejor nos concentraremos en destacar pendientes de sus respectivas administraciones.

Para comenzar, habríamos de cuestionar al alcalde Remberto Estrada Barba si, en caso de reelegirse, seguirá con la misma dinámica de no coordinarse con las fuerzas estatales de seguridad, cuando su municipio se ha convertido en el más violento de Quintana Roo, con más de un centenar de ejecuciones tan sólo en 2017, seguir igual es apostarle a que se agrave la situación así que habrá que conocer el cambio de estrategia. Del turismo y la economía local, siendo Cancún el principal motor de la industria a nivel nacional, es bien sabido que funciona a pesar de los gobiernos.

Para los alcaldes neopanistas también hay cuestionamientos en serio: A Perla Tun, de Cozumel ¿seguirá confrontada políticamente con el gobernador Carlos Joaquín González? A Cristina Torres, de Solidaridad ¿en serio se quiere reelegir, pero sobre todo, la revocación de la concesión de agua potable a Aguakan seguirá siendo sólo tema de campaña? Y a Luis Torres, de Othón P. Blanco ¿cuándo operará el nuevo relleno sanitario y se dejará de poner en riesgo la salud de los habitantes de por lo menos cinco fraccionamientos de la capital del estado? Y ni hablar del “peliagudo” proceso legal del alumbrado público.

A las alcaldesas priístas de Felipe Carrillo Puerto y Tulum, Paoly Perera y Romalda Dzul, respectivamente, más que por pendientes habría que preguntarles si ya iniciaron su gestión, ahora que ya están pensando en la segunda, porque hasta ahora nomás no se les ha visto, los mismo que el alcalde de José María Morelos, José Baladez, el único que al parecer no buscará reelegirse, sabedor del lamentable papel desempeñado en tan sólo dos años. Y, por último, todos, incluyendo a la alcaldesa de Puerto Morelos, Laura Fernández Piña, deberán explicar la manera en que obtendrán recursos para obras y servicios, pues al cierre de 2017 todos, hasta el gobierno estatal, tuvieron problemas hasta para pagar nómina y prestaciones. No se requieren gobiernos que pervivan, sino que trabajen y brinden resultados. Así que respuestas antes que campañas.

Comentario morboso

Y hablando de procesos y candidatos, parece que las boletas electorales se conformarán de manera muy diferente a como inicialmente se pensó, lo que originaría cambios de fondo en el gabinete de Carlos Joaquín González. No, no tiene que ver con la autopromoción que se hace el aun Oficial Mayor, Manuel Alamilla Ceballos; pero ¿qué tal si el que sale es el Jefe de Despacho del gobernador, Miguel Ramón Martín Azueta? Sin duda es electoralmente rentable como candidato a diputado federal por el Distrito 01, pero sobre todo ¿quién ocuparía ese espacio, considerado el “número dos” del gobierno estatal? Sobre ello abundaremos en el próximo tiro. Y por la oposición ¿qué tal si la diputada local priísta, Leslie Hendricks Rubio, se “convierte” en neoaliancista y contiende como candidata al Senado de la República? Esos movimientos cimbrarán todo enero; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.
P.D. Feliz Año, esta columna, que es suya, ha regresado.

Lo más leído

skeleton





skeleton