La situación de la cultura
La pandemia de Covid-19 causó la pérdida de diez millones de puestos de trabajo en las industrias culturales y creativas de todo el mundo.
La UNESCO dice que, aunque la esfera cultural y creativa es un sector económico en pleno auge, la escasez de inversiones en este ámbito estaba frenando su impulso.
La pandemia de Covid-19 causó la pérdida de diez millones de puestos de trabajo en las industrias culturales y creativas de todo el mundo, y ahora que la rápida transferencia de espectáculos y contenidos culturales hacia las plataformas digitales se confirma como una tendencia derivada de la crisis, es urgente que elaboremos sistemas de remuneración más equitativos para los artistas cuyas obras se divulgan en internet.
La cultura y la creatividad contribuyen a la economía mundial con el 3.1% del PIB mundial y el 6.2% de todos los empleos del mundo.
Aunque parezca poco la cantidad no es nada despreciable. Tan solo en 2020, el valor de los sectores creativos y culturales en todo el mundo se redujo en 750.000 millones de dólares, por la falta de financiación como el obstáculo principal y la pérdida de 10 millones de empleos en esta industria alrededor del mundo. También se perdió movilidad.
Los artistas, en particular los que proceden de países en desarrollo, tropiezan con dificultades para acceder a la financiación, la información, las formaciones y las infraestructuras culturales.
El 79% de las residencias internacionales de artistas están en Europa y América del Norte y la movilidad Sur-Sur sigue siendo difícil. Entonces se ha tenido que hacer una movilidad digital que ha ido en crescendo. Entre 2016 y 2021, las actividades en línea aumentaron exponencialmente.
Tan solo en 2020 el 62% de los ingresos totales de música procedían del internet. Netflix subió de casi 70,000 usuarios por minuto a 600,000 por minuto.
Y los escuchas de Spotify aumentaron de 40,000 a 200,000 cada hora; el problema es que se tiene que elaborar modelos comerciales que remuneren equitativamente a los creadores de contenidos digitales e invertir en contenidos locales y mejorar su disponibilidad en las plataformas digitales.
Sin duda mucho por hacer y en cada país tendremos que hacer un gran esfuerzo y enfocarnos en lo de hoy y a enterrar el pasado. Todo cambia y el arte y la cultura no serán la excepción. Hasta la próxima semana.