Los adelantados y la decisión final
Cuando aún falta mucho tiempo para la toma de decisiones, ya hay quienes están muy alborotados...
Cuando aún falta mucho tiempo para la toma de decisiones, ya hay quienes están muy alborotados con miras a 2027 y pretenden agitar las aguas a su favor, pese al riesgo de terminar “quemados” antes de encender el fuego.
Y así intentan manipular a medios y periodistas para que éstos empiecen a publicar notas y opiniones a su favor, más preocupados por perfilarse como “la opción” que por realizar un trabajo óptimo en el cargo que hoy ocupan. Esto, es hoy, casi como arrojarse al caldero.
Algunos dicen que hay muchos adelantados que terminan por ser más bien extraviados, en una desorbitada ambición política que hoy sólo deja entrever que buscan sólo el poder por el poder, mucho, muchísimo más allá de trabajar por el bien de la gente y llegar a la anhelada “prosperidad compartida”, tan pregonada en estos tiempos.
Lo cierto es que no hay mejor carta de presentación que la prudencia y, sobre todo, el buen trabajo, si lo que buscan es agradar a la gente que toma las decisiones y a los votantes. Hacer lo contrario –como algunos de ellos lo hacen- resulta simplemente estéril.
En primer lugar, estos adelantados o extraviados, deben tener bien claro que la decisión final en cualquier partido se toma en el centro del país. Puede haber proyectos y propuestas locales, sí, pero quien tiene la última palabra, quien palomea finalmente, es allá, en las dirigencias nacionales o los “mandamases” que se ubican a cientos de kilómetros de aquí.
Es allá donde ven y analizan perfiles, logros, trabajo, esfuerzo y, en fin, todas las aptitudes y actitudes de cada uno de los prospectos, para entonces ser ungido como candidato o candidata formal rumbo a la “silla grande”.
Hay algunos analistas que advierten ciertos sesgos o ciertas formas para, desde ahora, hacerse una idea de lo que vendrá en poco más de un año.
Me explico: Como ejemplo, estos analistas observan declaraciones que –según ellos- pueden ser detonantes, como aquella frase expresada: “Somos un gobierno humanista y feminista”.
Para los “eruditos” este sería un signo inequívoco” de por dónde viene el balón. Observan que al ser humanista, “todos caben en la jugada”, cosa contraria al considerarse “feminista”, con lo cual –reitero, según ellos- el universo se reduce al género femenino y, por consiguiente, desde ahora perfilan a una mujer, “ya que un gobierno feminista, por obvias razones, tendría que decantarse por una fémina”, aducen.
¿Será?
Repetimos: De aquí pueden surgir proyectos y propuestas muy válidas, y que sin duda pesarán en el ánimo de la determinación final, pero el palomeo está en el centro del país, y aquel que sepa moverse más y mejor por aquellos lugares, sin duda tendrá puntos a su favor, sea hombre o sea mujer.
El balón sigue rodando y hoy lo mejor es ponerse a trabajar por el bien de la gente que los eligió.
No hay más…