Se ha encontrado que la música puede causar un efecto parecido a la euforia en algunas personas. Parece ser que el ritmo de la música nos recuerda el latido del corazón de nuestras madres cuando nos cargaban en su vientre.

La música también estimula la región del cerebro que responde a la comida y al bienestar que se siente con ella. La música nos hace evocar momentos alegres, cuyo recuerdo es todavía lo suficientemente poderoso para sentirse bien otra vez.

También la música me hace ponerme triste que evoca alguna situación del pasado o me hace pensar en que podrían pasar cosas en el futuro. Esta herramienta poderosa tiene la peculiaridad de ser muy maleable y producir cualquier estado de ánimo, y es nuestra decisión elegir que escuchamos y que no.

La música produce felicidad, reduce la ansiedad y el estrés asociados con enfermedades del corazón. También si no te agrada hacer ejercicio la música puede ayudarte a pasarla mejor y hasta disfrutar el ejercicio que estés haciendo mientras la escuchas.

¿Nunca les ha pasado que se les pone la carne chinita solo de escuchar música? Estoy seguro de que en alguna ocasión toda la gente ha sentido esto y es maravillosa la sensación de bienestar que provoca esto. Y qué decir de tocar un instrumento; hará que mejoremos las habilidades visuales y verbales significativamente y los investigadores sugieren que estudiar música provee beneficios sociales altamente medibles.

Una persona con educación musical amplia generalmente está más satisfecha que las personas que no la han estudiado. Y no olvidemos que disfrutar de la música va a fomentar la liberación de dopamina en el cerebro, la cual está ligada a la motivación y está implicada en el aprendizaje y en la memoria. Y está demostrado que la gente que escucha música mejoró la memoria verbal y tuvo mejor enfoque en la atención.

Les voy a dar un tip, si ustedes escuchan música por un lapso de solo 20 segundos podrán cambiar la forma en que se juzga la cara de otras personas y por tanto nosotros también proyectaremos el ánimo de la música que escuchamos.

Así que los beneficios de escuchar música y/o de ejecutar un instrumento pueden hacer la diferencia en nuestras vidas. Hasta la próxima semana.