La música es la columna vertebral de toda cultura y civilización. Históricamente, la música puede remontarse a los primeros cantos de nuestros antepasados hombres de las cavernas. Las antiguas civilizaciones, especialmente las Orientales, estaban sometidas al control de gobernantes que conocían el poder de la música y por ello determinaban de una forma sumamente rigurosa lo que podía escucharse y ejecutarse.

Se han ganado batallas y comenzado revoluciones gracias a la inspiración de los himnos patrióticos. La música vibrante de las gaitas fue utilizada inicialmente para asustar a los enemigos de los ejércitos escoceses. También las guerras han obligado a los grandes músicos a huir de su patria, a asimilar nuevas culturas y a echar raíces en sus países de adopción.

Gente de la talla de Stravinsky, Rachmaninov y otros rusos escaparon de los comunistas como muchos compositores y artistas alemanes, austríacos, polacos y checos huyeron del reinado de terror de Adolfo Hitler antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial.

La invención musical a lo largo de los siglos ha mejorado la calidad de los antiguos predecesores de los instrumentos musicales y agregaron otros nuevos. Estoy convencido de que Mozart y Beethoven habrían deseado escuchar sus obras para Piano en un moderno Steinway & Sons de concierto.

Al igual que el desarrollo de nuevos y mejores instrumentos musicales se ha progresado en el campo de la reproducción musical cambiando de los artefactos de cristal y los cilindros de Edison a los discos compactos (CD) y a las cintas de audio digitales. Es increíble la ilimitada diversidad de la música que podemos tener instantáneamente cuando nuestros dedos encienden la radio y desde el punto de vista geográfico, la música siempre ha trascendido a todos los límites internacionales.

Europa como cuna de la cultura occidental vio nacer a la mayoría de los compositores y músicos. Con la expansión y los viajes de colonización, la música y las artes se extendieron al continente Americano y a otras regiones del mundo. Continuará… Hasta la próxima semana.  (1a de 2 partes)