Alianzas
Lo que pasa en cualquier parte del mundo repercute en todos...
En esta etapa de la vida y con los acontecimientos globales que estamos viviendo, más la suma de la pandemia causada por el coronavirus y demás cosas, no podemos negar que todo está conectado con todo y aunque no lo aceptemos, lo que pasa en cualquier parte del mundo nos repercute a todos. Antes estaban muy definidas las situaciones por territorios. Lo que pasaba en Europa era sumamente local, al igual que en Oriente o los países árabes. Ahora nos afecta todo. Recuerdo a mi papá diciendo que cuando a Estados Unidos le daba gripe a nosotros nos daba pulmonía y ahora resulta un efecto dominó mundial. Siempre he visto a México como mi gran orquesta y concibo que cada quien tiene una función que hacer para que esa orquesta pueda sonar a plenitud. Unos tocan instrumentos, otros hacen arreglos de obras, otros componen material original, otros administran, así como quien provee los recursos o quien pone el recinto donde se presenta la agrupación y tan importante es el director o el solista, como cualquier integrante de la misma sin importar su posición, ya sea artista o administrativo. El mundo debería de copiar esto haciendo alianzas en todo momento. En esta pandemia, el mundo entero aprendió que, sin importar edad, sexo ni posición social, todos nos podríamos enfermar y muchos quedaron desamparados en ingreso y lo que esto conlleva. Unos ponían el pan, otros el jamón, el otro la verdura y la salsa, otro la mayonesa y al final de esto todos comíamos un sándwich. ¿Quién puso más? No sé y tampoco importa porque el que tenía más le faltaban ingredientes que alguien daba haciendo un ganar – ganar. Un violín solo suena lindo, pero acompañado de otro violín, una viola, violonchelo y contrabajo suena mejor y si les agrego flauta, oboe, clarinete, fagot y aparte sumo corno, trompeta, trombón, tuba e instrumentos de percusión, sonará aún mejor por el timbre que cada uno proporciona y el volumen que ejercen todos en grupo. Así que sumemos todos y dejemos de restar. Yo hago lo que tú no haces, y tú haces lo que yo no sé hacer y siempre se necesitará un coordinador que haga que todo suene aunque este individuo no sepa tocar todos los instrumentos como se cree. Suma a la gente que quieres y haz equipo que México y el mundo necesitan equipos que suenen y que suenen muy bien. Hasta la próxima semana.