|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Vivimos sin duda una época de cambios y me pregunto si la gente que se queja está cambiando con las necesidades de la época. Los artistas somos malos vendiendo y le echamos la culpa al vecino de lo que está sucediendo. Siempre ha habido crisis, siempre ha existido el menosprecio por el arte, el artista plástico sigue pintando lo mismo de hace 40 años y el músico sigue tocando lo mismo y sonando igual y hasta con el mismo repertorio. Entonces el artista se enoja y saca su dedo flamígero y empieza a echarle la culpa a todos de porque las cosas andan mal. Los cambios son todos los días si es que queremos sobrevivir, pero si te molestas y dices pues yo no cambio y que el mundo se friegue, el mundo seguirá su camino y tú te habrás estancado. El problema son los egos que caen en una frase que me enseño mí hijo: Narcisismo Intelectual. No aceptas que no sabes porque… imposible que tu no sepas que hacer. Se vale decir no se y se quita uno un gran peso de encima. ¡Créanlo! En el siglo XVI hubo muchos cambios y fue el establecimiento del Renacimiento en todo su esplendor y mismo que puso el fin definitivo de la Edad Media, la caída del feudalismo e inicio una nueva conciencia individual que tendría su máxima expresión en Miguel Ángel Buonarroti, primer gran ARTISTA con mayúsculas, que con su esfuerzo y genialidad elevó las artes plásticas a la mima categoría que disfrutaban las artes liberales como las matemáticas y la filosofía, por ejemplo. En esa época los artistas ya tienen una fuerte base académica, ya no son simples artesanos sino que aprenden distintas ramas científicas del Humanismo. Los humanistas defienden el conocimiento de la verdad a través de la experiencia, la razón y la experimentación; del modelo teocentrista medieval se pasa a un nuevo modelo en el que el hombre es el centro del saber. Y hacia mediados del siglo se da la primera gran reforma de la Iglesia tras la aparición de sectores muy críticos con el alto nivel de vidas de los papas, el Concilio de Trento, que desembocó en la aparición de la Iglesia Protestante, a lo que la Iglesia Católica arremetió con su contrarreforma, que ocasionó la aparición del Barroco. Seguiré con este tema la próxima semana. Nos leemos.

Lo más leído

skeleton





skeleton