Mildred

A Mildred Ávila le llegó el momento de la definición. Ha hecho la talacha durante años y sabe que...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

A Mildred Ávila le llegó el momento de la definición. Ha hecho la talacha durante años y sabe que si no se avienta ahora, no lo hará nunca.

Política siempre institucional, política que ha trabajado para que otros lleguen, política que sin duda cuenta hoy con un capital y con la experiencia que no pueden ser echados por la borda.

Todo se presta para que Mildred al fin levante la mano buscando lo que sus seguidores llaman “justicia política”: La presidencia de Benito Juárez. Argumentan que “la mesa está puesta, ya que hoy es el tiempo de las mujeres, es el momento de Morena y no hay otra aspirante con el capital político ni con las credenciales suficientes como ella”.

Formada en las filas del entonces poderoso Frente Único de Colonos (FUC), organización encabezada por Magaly Achach, y uno de los brazos fuertes que durante décadas operó a favor del Partido Revolucionario Institucional, la diputada debe eliminar sus propios fantasmas, desatar nudos que ella misma se ha impuesto y arrojarse para buscar la candidatura a la presidencia municipal de Benito Juárez.

Hecha con base en el trabajo, siempre (durante décadas) al lado de la población, en especial de la gente con más carencias, Ávila Vera ha mantenido un perfil “decoroso”, pero sin atreverse nunca a dar ese paso que la llevaría a la silla más importante de este municipio.

Hace años, la política morenista rompió lazos con la ex alcaldesa Magaly Achach, y hoy es líder y creadora de la organización Superación Ciudadana Quintanarroense (Suciqroo) lo que la ha potencializado en materia política, al grado de representar un “as” para el partido que la postule (sea Morena o no), con un triunfo casi asegurado para su causa.

La ex priista es una persona bien vista por la gente, en especial de las colonias, en donde ha trabajado durante más de tres décadas. Ha sido diputada local en múltiples ocasiones, así como diputada federal y síndico en Benito Juárez, sin que hasta el momento nadie la haya acusado por algún exceso, enriquecimiento, soberbia o nepotismo.

También ha ocupado cargos públicos dentro de la Secretaría de Educación y en el Instituto Quintanarroense de la Mujer.

Mildred Ávila es pues una política bien vista en las filas de su partido Morena e incluso en el PT, sin soslayar otras fuerzas políticas de oposición que con gusto le abrirían el espacio para contender en el 2024.

En fin, el trabajo de la actual diputada está hecho, ha sido constante durante años y no requiere de mayores reflectores. La gente la conoce y reconoce su labor en apoyo a las personas más necesitadas, primero en el FUC y ahora –desde hace más de 20 años- al frente de Suciqroo. La diferencia es que ella aspira, no ambiciona (como otras).

Cancún no puede con más improvisaciones.

Lo más leído

skeleton





skeleton