Sostenibilidad ambiental
Crecimiento sostenible, empleo verde, desarrollo sostenible y ahora economía circular...
Crecimiento sostenible, empleo verde, desarrollo sostenible y ahora economía circular son términos que seguramente has escuchado o leído y te has preguntado qué son, cómo funcionan y si en algo sirven para tener un mejor medio ambiente y por más tiempo. Hoy te compartiré algo sobre la economía circular, que en los últimos años nos han dicho que define hacia dónde debería ir nuestra economía.
La economía circular es reparadora y regenerativa y pretende conseguir que los productos, componentes y recursos en general mantengan su utilidad y valor en todo momento. Este concepto distingue entre ciclos técnicos y biológicos. El objetivo es que “la producción de bienes y servicios reduzca el consumo y el desperdicio de materias primas, agua y fuentes de energía”, según la Fundación para la Economía Circular.
Sus defensores quieren implementar una nueva economía y la denominan circular, en contraposición a la lineal, que es la predominante, porque se basa en el principio de “cerrar el ciclo de vida” o el círculo de los productos.
Todo proceso de producción o fabricación de bienes y servicios conlleva un costo ambiental, ya que supone el consumo de recursos naturales y no puede ser gratuito. Así, por ejemplo, al diseñar un coche, el fabricante debe tener en cuenta qué va a pasar con cada uno de los tornillos, tuercas, ruedas, amortiguadores, asientos, etc., una vez que el coche haya hecho todos los kilómetros que podía y sea llevado al desguazadero.
Con el modelo económico y de desarrollo actual, estamos agotando ciertos recursos naturales, pero la economía circular propone un nuevo modelo de sociedad que utilice y optimice los materiales y residuos, dándoles una segunda vida. Así, el producto debe ser diseñado para ser reutilizado y reciclado; es decir, gracias al ecodiseño, desde la primera pieza hasta la última pueden servir de nuevo. Con la economía circular se trata de convertir los hasta ahora considerados residuos en nuevas materias primas y, además, generar empleo en el contexto de la llamada economía verde.
Se dice que cada mexicano consume catorce toneladas de materias primas y genera otras cinco de basura al año. La economía circular plantea reutilizar, reparar o reciclar los productos o sus materiales, con la finalidad de reducir nuestros residuos.
La economía circular ha generado (y sigue generando) no solo informes y documentos técnicos, sino también ensayos muy interesantes. Algunos especialistas señalan que, en una economía circular, al contrario que en la basada en el principio de “usar y tirar”, el ciclo de vida de los productos se extiende gracias a un mejor ecodiseño que facilita las reparaciones, la reutilización y la refabricación de viejos productos.
Tal como la imaginan sus creadores, consiste en un ciclo continuo de desarrollo positivo que conserva y mejora el capital natural, optimiza el uso de los recursos y minimiza los riesgos al gestionar una cantidad finita de existencias y unos flujos renovables. Además, funciona de forma eficaz en todo tipo de escala. Es necesario reconocer que debemos iniciar el camino hacia una economía circular que nos permita un mejor aprovechamiento de los recursos naturales y no comprometer el futuro del planeta.