Ya en el segundo semestre del año y con la mayoría de los triunfos electorales en firme, en las 11 presidencias municipales de la 4T se preparan para rendir el tercer informe de gobierno y para, en la mayoría de los casos, rendir protesta por un periodo de tres años más.

Y es que los triunfos arrolladores del pasado 2J de Morena y aliados, no dejó lugar a dudas y tampoco mucho margen de maniobra para la impugnación en municipios como Benito Juárez, Solidaridad y Puerto Morelos, de ahí que en esas demarcaciones no hay nubarrones que puedan nublar las tomas de protesta correspondiente de las presidentas municipales de la 4T.

Hay que explicar que en el mes de septiembre, la gobernadora Mara Lezama, la primera mujer en gobernar el estado de Quintana Roo, presentará su segundo informe de gobierno respecto a toda la obra pública realizada y demás acciones en beneficio de los ciudadanos, posterior a ello en las presidencias municipales realizarán sus respectivos informes del estado que guardan las arcas municipales y también de sus obras y acciones.

Pues bien, en ese  mismo mes, pero a finales, las autoridades municipales deberán rendir protesta para el nuevo periodo municipal, el cual concluirá en el 2027, y en la mayoría de los municipios habrá continuidad, pues ganaron en las elecciones del pasado 2J.

En ese contexto, a partir del 1 de octubre, en Quintana Roo no habrá un solo municipio, de los 11 que lo conforman, que no sea gobernado por Morena y aliados, con lo cual las políticas públicas y de beneficio para los que menos tienen de la 4T permearán en todos los rincones.

Hay que recordar que en Solidaridad, el último de los reductos de la oposición, la 4T arrasó con Estefanía Mercado, quien asumirá el 30 de septiembre para pintar de guinda la entidad.

En los primeros días del mismo mes, la XVIII Legislatura asumirá en el Congreso Local, donde nuevamente la 4T tendrá 21 de 25 diputados locales, lo que significa mayoría calificada para  aprobar leyes y reformas que haga llegar la jefa del Ejecutivo estatal, además de avalar y aterrizar las reformas que les sean enviadas por el Congreso de la Unión.

Así las cosas en Quintana Roo, donde el escenario para los próximos tres años de gobierno serán tersos, pues no habrá oposición alguna que haga sombra o pueda influir en la  toma de decisiones tanto del gobierno estatal, municipales y en el Congreso local. Hasta la próxima.