Braulio Carbajal/Milenio
JUCHITÁN, Oaxaca.- Dado que uno de cada tres municipios del país carece de acceso a servicios bancarios, a cientos de comunidades rurales no les queda más remedio que tratar con cooperativas y cajas de ahorro popular, con el riesgo de tener que pagar réditos más altos o hasta de perder sus ahorros por fraudes.

Según el último Reporte de inclusión financiera de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), 787 de los dos mil 457 municipios del país (32 por ciento), no cuentan con un solo punto de acceso para retiros o depósitos de efectivo.

Ejemplos de esta marginación financiera son las comunidades indígenas de Álvaro Obregón y San Juan Guichicovi, ubicados en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, cuyos habitantes deben destinar más de cinco horas si necesitan un servicio financiero básico.

En el primer caso se trata de un municipio cuyas principales actividades de sus habitantes de origen zapoteco son la pesca, la agricultura y la elaboración de trajes tradicionales. Para acudir a un banco deben recorrer más de 25 kilómetros por una carreta federal hasta Juchitán de Zaragoza.

En tanto, los habitantes de San Juan Guichicovi hablan mixe, y para llegar a la ciudad de Matías Romero en busca de un cajero tienen que recorrer un camino de terracería durante dos horas a través de laderas en las montañas del noreste de Oaxaca.

El único contacto con el mundo financiero para estas comunidades es por medio de las cooperativas de ahorro; no obstante, muchas de ellas operan irregularmente al no tener aprobación de las autoridades.

Luego de escándalos por fraudes, la Condusef recomienda ciertas cajas en el Oaxaca por operar con un seguro de depósito que garantiza 128 mil pesos:

• Caja Popular Mexicana.
• Solidaria de San Juan Lachao.
• Acrimex.
• Yolomécatl.
• Esperanza Indígena Zapoteca.

Ha sido fuerte la polémica en el estado por la demanda de ahorradores de que el gobierno a nivel estatal y federal cubra ciento por ciento de las pérdidas de defraudados cuando se tiene un programa de cobertura (Fipago) que los respalda por 70 por ciento.

En Oaxaca los ahorradores han perdido siete mil millones de pesos, más de una cuarta parte del total nacional.

Caja Popular Mexicana es una de las cooperativas reguladas que se ha acercado a estas localidades. Por medio del envío de ejecutivos financieros rurales organiza grupos de entre 12 y 28 personas que quieran ahorrar y acceder a un microcrédito productivo de mil a 30 mil pesos.

En Álvaro Obregón, Juchitán de Zaragoza, Talea de Castro y otros municipios marginados de Oaxaca y de otros estados, la entidad financiera cuenta con grupos que han accedido a crédito y ahorro sin la necesidad de trasladarse a la ciudad más cercana, lo cual se traduce en el ahorro de tiempo y dinero para los habitantes cuya situación es de pobreza.

Una vez que los grupos están organizados, los ejecutivos de Caja Popular Mexicana acuden cada mes al municipio para cobrar el abono de los créditos. A su vez, la población puede dar ahorro o hacer trámites para convertirse en miembros y acceder a microfinanciamiento.

Alfredo Antonio Gómez, representante de la comunidad de Álvaro Obregón y socio de la caja popular desde hace más de 18 años, dijo que con el crédito, los habitantes de la comunidad han logrado mejorar su calidad de vida, dado que ahora cuentan con recursos para comprar artículos para ejercer sus diferentes oficios.

"A diferencia de un banco, una caja de ahorro te enseña la importancia del trabajo en equipo, te enseña a ser humilde. Desde que llegó el programa Semilla Cooperativa, de Caja Popular, he notado un cambio en mis paisanos, ahora luchan contra la pobreza y la miseria", dijo Gómez.

Oaxaca es uno de los estados más pobres del país y donde la banca comercial tiene menor presencia. Caja Popular Mexicana tiene en dicha entidad un total de mil 797 socios que pueden acceder a ahorro, y sobre todo a microcrédito productivo a una tasa mensual de 2.28 por ciento.

Carencia

• De acuerdo con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, durante los primeros cinco meses del año los 45 bancos comerciales que operan en el país han conseguido una ganancia sustanciosa de más de 42 millones de pesos.
• Según el último reporte de inclusión financiera de la CNBV, más de 30 por ciento de los municipios del país no cuentan con un solo servicio de la banca; en la mitad hay cajeros automáticos.
• En los más de 700 municipios sin servicios financieros viven más de 4 millones de personas, las cuales en su mayoría viven en condiciones de pobreza y son blanco fácil para financieras pirata que no cuentan con permiso de las autoridades para dar servicios financieros.