Agencias
NUEVA YORK, EU.- Fiscales de Estados Unidos han pedido a la corte que analice si Joaquín El Chapo Guzmán no puede permitirse pagar un abogado privado, ya que, aseguran, es necesario averiguar si los contribuyentes estadounidenses están pagando de forma innecesaria la defensa del líder "de la mayor y más prolífica organización de tráfico de drogas del mundo".

Guzmán, que logró escaparse en dos ocasiones de penales de alta seguridad, fue extraditado hace unas dos semanas a Estados Unidos desde México. Está acusado de dirigir un cártel de drogas con integrantes que obtienen ganancias por miles de millones de dólares.

En una carta dirigida al juez Brian Cogan, los fiscales aseguran que el análisis sobre la situación financiera de El Chapo está justificado debido, entre otras cosas, a numerosos reportes sobre su supuesta enorme riqueza.

"Tal y como indica la acusación, Guzmán estuvo involucrado en el tráfico de al menos 250 toneladas de cocaína en cargamentos destinados a los Estados Unidos, de los cuales sólo una parte fueron incautados. Esa cocaína está valorada en miles de millones de dólares", dice la carta.

Cuando la oficina de los fiscales fue contactada para saber si a Guzmán se le permitiría pagar un abogado privado con dinero obtenido de la venta de droga, la respuesta de los portavoces fue que rechazaban comentar sobre el asunto.

Los fiscales Robert Capers y Arthur Wyatt también aseguran en su carta que los abogados de oficio de El Chapo, del grupo Federal Defenders, representaron en corte en el pasado a dos individuos que podrían ser testigos del gobierno durante el juicio de Guzmán, además de a otros tres cómplices del capo. Eso, afirman, podría suponer un conflicto de intereses.

Los fiscales no mencionan a los individuos por su nombre. Capers y Wyatt dicen que si la corte dictamina que Guzmán no puede pagarse un abogado privado, habría que fijar una audiencia para analizar esos posibles conflictos de interés y asegurar que el acusado está enterado de ellos.

Defensa pide presencia de El Chapo

Por su parte, los abogados de Joaquín El Chapo Guzmán solicitaron que la corte federal de Nueva York permita que el narcotraficante mexicano esté presente físicamente en la audiencia preliminar de su caso en vez de participar sólo mediante videoconferencia.

En una moción incorporada en lunes al expediente público del caso, los abogados indicaron que la presencia física de Guzmán en la audiencia fijada para el 3 de febrero es necesaria para proteger su derecho a obtener orientación legal y para garantizar su confianza en la equidad del proceso judicial.

La solicitud fue ingresada luego de que el pasado 25 de enero, cinco días después de la presentación de Guzmán ante un juez magistrado del condado de Brooklyn, en Nueva York, la corte comunicara su preferencia de que el acusado participara en la audiencia preliminar mediante videoconferencia.

La corte señaló que su preferencia por la videoconferencia durante la audiencia preliminar del 3 de febrero tenía el fin de “minimizar interrupciones durante el transporte físico” de la prisión en Manhattan, en que se encuentra detenido Guzmán, a los tribunales de Brooklyn.

La defensa de Guzmán destacó sin embargo que “la aparición por videoconferencia es un pálido sustituto de la presencia física en la sala del tribunal”, y que este recurso se utiliza sólo cuando el acusado ha interrumpido los procesos de la corte en ocasiones anteriores.

En ese sentido, los abogados de Guzmán indicaron que el sospechoso se comportó de manera respetuosa cuando fue presentado ante el juez, así como durante su detención.

Asimismo, al estar reunido en la sala de la corte con su abogados, Guzmán podrá ejercer su derecho a pedir y recibir orientación en cuestiones de procedimiento.

Los abogados señalaron además que la presencia del acusado en la corte es necesaria pare evitar “publicidad preliminar perjudicial”, que genere “la impresión pública de que Guzmán es demasiado peligroso para ser llevado a la sala del tribunal”.

Guzmán enfrenta en Nueva York un total de 17 cargos relacionados con una presunta actividad criminal que se extendió durante tres décadas, durante las cuales importó y distribuyó cientos de toneladas de drogas a Estados Unidos, por lo que podría ser condenado de por vida a prisión.

Los documentos de la defensa confirmaron que Guzmán, extraditado a este país el pasado 19 de enero, se encuentra en el Centro Correccional Metropolitano, encerrado en una celda solitaria durante 23 horas al día con derecho a una sola hora de ejercicio.

Revelaron también que a Guzmán no se le permite reunirse con sus abogados ni hacer ninguna llamada telefónica ni a sus familiares ni a sus representantes legales en México.

(Con información de The Associated Press y Notimex)