Encuentran muerto al magnate Boris Berezovsky
Se desconocen las causas, pero algunos medios señalan que estaba deprimido y pudo suicidarse.
EFE
LONDRES, Inglaterra.- El oligarca ruso Boris Berezovsky, muy crítico con el presidente ruso, Vladímir Putin, ha sido encontrado muerto en su casa de la localidad de Ascot, a las afueras de Londres, confirmó hoy un amigo suyo.
"El cuerpo fue hallado por su guardaespaldas. Por el momento no hay más detalles", dijo a los medios británicos lord Tim Bell, empresario del sector de las relaciones públicas.
Por ahora se desconocen las causas de la muerte de Berezovksy, pero algunos medios afirman que estaba deprimido y pudo haberse suicidado, aunque esta circunstancia no ha sido confirmada.
El oligarca, de 67 años y muy conocido en el Reino Unido, emigró a este país en 2000 a raíz de sus problemas con la Rusia de Putin y tuvo un enfrentamiento empresarial con el dueño del club inglés Chelsea, el también ruso Roman Abramóvich.
En 2012, Berezovsky, que iba a todas partes con guardaespaldas, perdió una batalla legal multimillonaria contra Abramóvich por considerar que éste le había intimidado para vender acciones en la petrolera rusa Sibneft por una "fracción" de su valor real.
Sin embargo, las acusaciones del oligarca ruso fueron rechazadas por el Tribunal comercial de Londres.
Tanto Berezovsky como Abramóvich consiguieron acumular cuantiosas fortunas en la Rusia de Borís Yeltsin.
El oligarca ruso -matemático en la era soviética y amigo de la familia de Yeltsin- inició su carrera empresarial con un concesionario de automóviles, pero, con la llegada de Putin al poder, huyó a varios países y se estableció en el Reino Unido.
En la capital británica, Berezovsky acudió a la justicia en octubre de 2011 para acusar a Abramóvich, uno de los millonarios más conocidos de Londres, de haberle obligado a vender su participación en Sibneft por "un valor sustancialmente inferior al verdadero mediante amenazas".
Pero ninguno de los dos consiguió aportar pruebas documentales para apoyar su versión sobre un caso en el que ambos magnates se remontaron a su relación en los años 90.
Según señaló en su día el Tribunal de Londres, Berezovsky fue un testigo "impreciso y poco fiable".
Berezovsky fue amigo del exagente secreto ruso Alexander Litvinenko, envenenado en Londres con una sustancia radiactiva a finales de 2006.