Redacción/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Hace casi cuatro años, frente a un lote ubicado en la Región 221, fueron ejecutados dos sujetos, un taxista y el dueño de la vivienda; las autoridades relacionaron el caso con la venta de droga. La noche del domingo, el mismo domicilio fue baleado por sujetos, y la línea de la Policía Judicial del Estado (PJE) es el narcomenudeo.

El agente del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC) inició el acta circunstanciada 500/2015 por hechos probablemente constitutivos de delito. Los agraviados aún no se presentan a interponer formal denuncia por los hechos.

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Las autoridades locales revelaron que cuando se registraron las dos ejecuciones en dicho domicilio, uno de los que participó, el cual se encuentra detenido y recluido en la cárcel de Cancún, dijo que la agresión era contra el dueño de la vivienda porque no se quería alinear con su grupo delictivo, ya que se dedicaba a vender droga de manera independiente.

Sujetos balean vivienda

La noche del pasado domingo, sujetos a bordo de un vehículo balearon la vivienda localizada en la Región 221, en donde las autoridades judiciales encontraron siete casquillos percutidos.

En diciembre del 2011, frente a ese domicilio, fueron ejecutados Cirilo N, de 51 años, y Wilmart N, de 32 años, de oficio taxista.

A las 19:44 horas del pasado domingo, las autoridades policíacas fueron alertadas sobre disparos con arma de fuego por esa zona.

Los oficiales se entrevistaron con C.M.G.P., de 22 años de edad, quien dijo a las autoridades judiciales que vio pasar un vehículo, tipo Jetta, rojo, a baja velocidad.

Dispararon en siete ocasiones

La unidad sospechosa se detuvo frente al domicilio; de la unidad bajó un sujeto delgado y de cabello chino, quien empezó a disparar a la fachada, mientras gritaba e insultaba a los ocupantes de la vivienda.

El conductor del vehículo era de complexión robusta, con tatuajes. En el lugar fueron levantados siete casquillos percutidos, calibre 45.

Elementos policíacos se entrevistaron con E.G.P., de 29 años de edad, quien señaló que estaba en el domicilio cuando escucharon las detonaciones; presentó dos rozones de bala en uno de los brazos.