Yajahira Valtierra/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Debido a los malos hábitos de alimentación,  30% de la población sufre de úlceras gastrointestinales, señaló personal de la coordinación de Primer Nivel de Atención y Prevención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Quintana Roo. 

Una úlcera gástrica es una ruptura en el tejido normal que recubre el estómago y es causada por un desequilibrio entre el ácido estomacal, una enzima llamada pepsina y las defensas naturales del revestimiento del estómago. 

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La automedicación y la ingesta de antiinflamatorios, representan el mayor riesgo para desarrollar úlceras en las personas, debido a que tienden a consumir con frecuencia medicinas que deben ser recetados por el médico junto con el adecuado protector al tubo digestivo, con el objetivo de prevenir complicaciones. 

De acuerdo con el titular de la coordinación, Felipe Robles Miguel, este tipo de  malestar afecta más a los jóvenes  de 18 a 35 años y a los mayores de 60, porque en estas etapas de la vida coinciden los diversos factores de riesgo que la producen.

Estos factores son:

• Estrés,
• ayunos prolongados, 
• abuso y automedicación de antiinflamatorios, 
• alcoholismo y 
• el consumo de irritantes en exceso (picante y grasas).

Síntomas

Los síntomas más habituales de una úlcera incluyen el persistente dolor y ardor en la boca del estómago (epigastrio), sensación de quemazón o ardor, los cuales suelen calmar con la ingesta de antiácidos. En casos más graves se presentan vómitos con sangre.

De acuerdo con los especialistas gástricos, las úlceras son curables hasta en 85% de los casos, bajo el adecuado y oportuno tratamiento médico, y se atienden en las unidades de medicina familiar.

Mientras que el 15 % restante de los pacientes presenta complicaciones, por lo que son enviados a los hospitales de segundo o tercer nivel de atención, ya que requieren de atención especializada y en otros casos hasta de cirugía.

El IMSS en el estado recomienda mantener una dieta equilibrada y sana, baja en alimentos ricos en grasas, realizar comidas pequeñas durante el día a intervalos regulares. Se aconseja además evitar el tabaco, el té, el café y las bebidas con cafeína, así como el alcohol y el consumo de antiinflamatorios.