Ajena completamente al duro ambiente del magisterio, la nueva titular de Educación, Sara Latife Ruiz Chávez, enfrentará un nuevo panorama a partir de este 8 de abril, día en que culmina el periodo vacacional de Semana Santa para los trabajadores de la educación.

Inteligente y con talento político, Ruiz Chávez sabe que las cosas en Educación no son nada fáciles, y que para ser aceptada y que su autoridad sea respetada por el magisterio, primero tiene que domar ese potro salvaje usando todas las armas que tenga a su disposición.

Las grillas en el magisterio son fuertes, y los trabajadores no son tan dóciles como en otras dependencias donde un golpe en el escritorio del jefe calma las aguas. Los administrativos de la SEQ y los docentes pertenecientes al SNTE se cuecen aparte.

Y es que Sara Latife ya comenzó a mover sus piezas dentro de la Secretaría de Educación, lo cual es sin duda indispensable para que pueda hacerse del control de la dependencia y conseguir sus metas, sin embargo como en todo cambio, hay subordinados que no la ven con buenos ojos.

En la SEQ, las cosas están en una calma aparente, gracias en parte a que la mayoría del personal se encuentra ausente por las vacaciones, pero a partir del lunes 8 de abril Sara Latife tendrá que poner toda la carne al asador.

Marcar distancia con el SNTE y cambiar a los directores de área “incómodos” es el primer paso para una buena conducción de la dependencia, pero este movimiento lo tiene que hacer con precisión quirúrgica, procurando no generar problemas serios con el magisterio, mucho menos en los meses del proceso electoral.

Su nombramiento causó escozor a más de uno al ser completamente una extraña dentro del magisterio, a diferencia de su antecesor, Eduardo Patrón Azueta, profesor de profesión que conocía muy bien las entrañas del gremio y el teje y maneje de los asuntos sindicales, facilitándole navegar sobre las picadas aguas del magisterio.

La cozumeleña no tiene esa ventaja, pero tendrá que aprender pronto a manejarse en este nuevo ambiente, pues la política magisterial y sindical es muy diferente a la política común. El potro magisterial la pondrá a prueba, la medirán para ver hasta dónde pueden llegar; por su parte, ella debe saber en que está dispuesta a ceder y en que no. La fina línea entre lo que te pido y lo que te doy puede definir una gestión exitosa de una desastrosa.

Sin duda, la tarea para Sara Latife, ex Secretaria de Turismo durante el sexenio de Félix González Canto no es fácil, y tendrá que aplicarse a fondo para realizar un buen papel a cargo de esta vital dependencia, sobre todo en los meses por venir donde se empezará a aplicar la Reforma Educativa del presidente Enrique Peña Nieto. Una dura encomienda para ella; ya veremos si estará a la altura.