Fernanda Duque/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Por primera vez en más de tres años, los servicios de salud de Quintana Roo diagnosticaron cáncer de mama en dos pacientes masculinos, así lo indica el último reporte del Sinave.

El Boletín de la semana 49 del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave), informa que en total se han identificado 181 casos de tumores malignos de la mama en hombres del país.

Hasta esta época del año, la Península registra en total cuatro pacientes masculinos, la mitad corresponden a Quintana Roo, uno a Yucatán y otro al estado de Campeche.

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El Instituto Nacional de Cancerología (Incan) indica que el cáncer de mama en el hombre (CMH) es poco frecuente, representa aproximadamente 1% de todos los casos; mientras que en el estado estos dos representan apenas el 1.2% de los 160 pacientes.

De acuerdo con la Jurisdicción Sanitaria número 2, este 2019 la Unidad de Especialidades Médicas para la Detección y Diagnóstico del Cáncer de Mama (Uneme Dedicam), sólo ha atendido a un hombre con síntomas de una posible tumoración, diagnóstico que posteriormente fue desestimado luego de realizar otras más pruebas y análisis.

“En los últimos tres años no se ha tenido incidencia, sólo uno que fue referido de otra unidad, lo atendimos pero se desestimó, resultó negativo. Realmente, la enfermedad se enfoca en las mujeres y es la población que se recibe”, informó.

¿Qué factores desencadenan el cáncer de mama?

Organismos internacionales señalan que al igual que en las pacientes femeninas, la presencia de esta enfermedad entre el género masculino tiene múltiples factores, entre ellos el genético, contar con antecedentes familiares, padecer de cirrosis, así como la edad, debido a que la mayoría se detecta entre los 60 y 70 años de edad.

Asimismo, los tumores que crecen fuera de las células que revisten la mama son el tipo más común de cáncer de mama en los hombres; al respecto de la recuperación, se estima que tienen la misma posibilidad de supervivencia.

Los síntomas son:

- engrosamiento en la mama o en el área de la axila,
- cambio en el tamaño,
- hundimiento del pezón,
- piel oscura o de naranja en la zona,
- enrojecimiento, y
- presencia de líquido o sangre.