CANCÚN, Q. Roo.- El año pasado, el gobierno municipal de Benito Juárez retiró 496 mil 860 toneladas de cacharros de las casas y calles de la demarcación con su programa de descacharrización, por lo que se espera un número similar para este año. 

La medida es para evitar que los desechos se vuelvan criadero de moscos que propaguen enfermedades como el dengue o chikungunya, entre otras, o que se conviertan en proyectiles durante las rachas de vientos fuertes, además de reducir la basura. 

Virginia Guadalupe Correa, directora de Atención a Demandas Emergentes del municipio, señaló que se atendieron 240 supermanzanas. Señaló que si bien se trata de cubrir todas las que hay en el municipio, cuando se calendariza se da prioridad a las zonas en donde se tiene previsto que aporten más cacharros que otras.

“Damos prioridad donde hay basureros clandestinos identificados o donde la gente lo solicita. Para evitar que aumente el volumen de desperdicios en lugares que pueden ser usados como basureros, la dependencia agenda esa zona con mayor frecuencia”, dijo. 

“De hecho, antes de que termine el mes nosotros ya tenemos calendarizado el siguiente, tomando en cuenta los puntos donde se detecte haya más cacharros, y donde es susceptible de que haya tiraderos clandestinos”. 

Señaló que las autoridades ya tienen identificadas algunas zonas, como las regiones 100 y 200, aunque también hay en el centro del municipio, como en las supermanzanas 23 y 27, “aunque son mínimas”. “Estas zonas se atienden, al menos, una vez al mes, por la cantidad de cacharros que aportan al programa”. 

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