La familia de Miranda, la niña de ocho años que sufre de inflamación cerebral por la caída de una portería en las instalaciones de su escuela; presentó junto con sus padres una denuncia en contra del centro educativo Benjamín Franklin por omisiones.

Wendolyne Moreno, madre de la pequeña, comentó que acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) a interponer de nuevo su denuncia contra la escuela por negligencia, al no asumir su responsabilidad en este caso.

"Venimos ante la Fiscalía para presentar la denuncia contra la escuela. Llevamos los documentos que nos dio el doctor y ya se anexaron al expediente".

Señaló que ya las autoridades comenzaron a realizar sus labores, luego de que personal de Servicios Periciales acudió a la escuela a hacer las primeras investigaciones.

Asimismo, informó que su hija salió del hospital, aunque tendrá que llevar un tratamiento de dos meses y será evaluada por los médicos de manera constante para monitorear su estado de salud y detectar posibles secuelas.

"La niña tendrá que estar en reposo y bajo valoración de los médicos. Además, a veces sigue presentando un poquito de dolor de cabeza", detalló.

La entrevistada descartó que vaya a retirar la denuncia, por lo menos no hasta que la escuela asuma su responsabilidad, por ello, también indicó que Miranda ya no continuará estudiando en dicho plantel, para evitar posibles represalias.

De igual manera, indicó que hay otras familias que han presentado quejas en contra de la escuela, debido a las condiciones de las instalaciones, pero temen dar a conocer de manera mediática la situación para evitar posibles represalias.

Accidente en escuela de Cancún deja a niña con inflamación cerebral

Cabe recordar, que el pasado viernes la madre de Miranda fue notificada por directivos de la escuela que la menor había sufrido una caída en la escuela, pero la niña explicó a sus padres que no se cayó, sino que la portería del colegio le cayó encima, manifestando fuertes dolores de cabeza, por lo que fue llevada a un hospital, donde le detectaron la inflamación cerebral.

Los padres de la menor acusaron a la escuela de no hacerse responsables del estado de salud de la niña, pese a que al momento de inscribirla se les cobró por un seguro de gastos médicos, que luego de la lesión se les informó que éste no cubría gastos de hospitalización, entre otros.