La historia maldita que te puede quitar el sueño por siete días
Se trata de la leyenda de una hechicera que raptaba a menores de edad para convertirlos en ofrenda.
Redacción/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Antes de leer esta está historia mejor detente aquí y piénsalo dos veces por que está maldita: cuenta la leyenda, que al leerla, contarla o escucharla, sucesos paranormales te podrían suceder; se trata de experiencias que podrían durar minutos, horas y hasta siete días, y que suelen suceder siempre al caer la noche.
Si decidiste ignorar la advertencia y correr el riesgo, comencemos: Hace mucho tiempo en algún lugar desconocido, una mujer que practicaba la brujería sabia a cazar niños para poder bañarse en su sangre y vivir varios años más.
También te puede interesar: 'Hat Man', el demonio que se le apareció a una familia de Cancún
La bruja luego de drenar la sangre de los menores, desmembraba los cuerpos para preparar brebajes y las almas eran ofrecidas al señor de la oscuridad.
La mujer vivía a las afueras del pueblo y al principio los habitantes no se alarmaban por la desaparición de los niños pues eran huérfanos y vagaban por ahí, pero pronto la hechicera acabó con todos los infantes que no tenían familia, así que ahora les tocaba a los niños que se atrevían a jugar cerca del bosque.
Tras la desaparición de dos pequeños hermanos que jugaban afuera de su casa, la gente enfurecida quiso atrapar a la bruja y le tendieron una trampa, al capturarla la torturaron hasta que apenas podía sostenerse.
Los habitantes tomaron la decisión de quemarla en leña verde, ya que con esto no regresaría de entre los muertos para vengarse, así que la ataron a un tronco y esperaron hasta que el ultimo rayo de sol se desvaneció para prenderle fuego.
Con odio y satisfacción esperaron que la bruja gritara, sin embargo ella no hizo ruido alguno, las llamas consumían su cuerpo pero ella no mostraba dolor, y cuando el fuego alcanzó el punto más alto ella dijo: Malditos ustedes y sus hijos y los hijos de sus hijos contaran mi historia y aunque mi cuerpo ya no esté, mi alma los perseguirá para atormentarlos como ustedes hicieron al desaparecer el ultimo rayo del sol. Y dio su último aliento y murió.