Eva Murillo/SIPSE
CANCÚN, Quintana Roo.- Al día, el Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM) atiende a un promedio de 10 madres de familia que acuden a las instalaciones para solicitar asesoría jurídica debido a la falta de responsabilidad de los padres de sus hijos, quienes no aportan una pensión para su manutención, señaló Macarena Carretero Valdivia, delegada en Benito Juárez.

Ser mamá soltera, en muchas ocasiones, no es un rol elegido por las mujeres, llevar solas la manutención y educación de los hijos sin el apoyo del padre de estos es cada vez más común en la sociedad, dijo. El IQM atiende, en promedio, a 60 mujeres al día que  llegan por diferentes motivos; de éstas, 10 buscan ayuda y asesoría de los abogados del instituto para obligar al padre de sus hijos a hacerse responsable de los menores.

También te puede interesar: Piden jubilados y pensionados reactivar seguro de vida

“La mayoría de las peticiones de apoyo están relacionadas con la pensión alimenticia, es difícil que los varones tomen conciencia de sus responsabilidades económicas y que por voluntad propia accedan a pasar dinero para la manutención de sus hijos”, señaló.

Carretero Valdivia lamentó la facilidad con que los hombres dejan la responsabilidad de manutención de sus hijos a las mujeres. “El varón piensa que el hecho de no reconocer a su hijo cuando nace, lo exime de compromisos con el niño y van por la vida teniendo hijos sin registrarlos como suyos”, indicó la funcionaria estatal.

La labor del IQM es indicar a las mujeres el camino que deben seguir para solicitar legalmente pensión alimenticia para sus hijos, pero el que el proceso llegue a completarse y tenga un buen término depende del empoderamiento de la mujer, pues hay ocasiones en que a mitad del camino desiste y prefiere dejar de defender sus derechos y hacerse cargo de los menores sin el apoyo del papá.

Para la delegada del IQM en Benito Juárez hace falta que la mujer “se la crea”, que se prepare para defender sus derechos. “Empoderamiento de la mujer no significa que salga a gritar a la calle o que se pelee con el vecino, significa que se prepare para ser independiente, que termine sus estudios y se capacite en algún oficio para que mejore sus oportunidades de vida”, dijo.