Sobrepeso "hunde" al 70% de los burócratas de Cancún
De estos, al menos 10 por ciento presenta un cuadro de diabetes.
Siete de cada diez trabajadores del Ayuntamiento de Benito Juárez sindicalizados han sido detectados con sobrepeso y obesidad en las jornadas de revisiones médicas, y 10 por ciento de ellos tienen diabetes.
Mario Osvaldo Cámara García, coordinador de la Unidad de Servicios Integrales de Salud y Bienestar de la Clínica del Sindicato de los Trabajadores del Ayuntamiento de Benito Juárez, detalló que ese es el balance que ha realizado su unidad a cargo en las pruebas realizadas a casi 250 trabajadores sindicalizados en el módulo instalado en el Palacio Municipal desde hace cinco semanas.
“La principal enfermedad que hemos detectado es la obesidad grado 1 y sobrepeso en un porcentaje aproximado del 60 por ciento en todos los trabajadores del Ayuntamiento (…) También hemos detectado que al menos el 10 por ciento de ellos no sabe que padece diabetes y que alrededor de seis de ellos no sabían que son hipertensos”.
Indicó que estos problemas de salud se dan sobre todo en el personal que se desempeña en las oficinas del gobierno municipal, que por su actividad permanecen sedentarios por varias horas. Incluso, añadió, algunos de los burócratas con esos puestos también han presentado problemas de columna y espalda.
El médico comentó que el segundo padecimiento hallado entre los trabajadores es el estrés laboral:
“El estrés laboral, que nos lleva a la ansiedad, que es un mecanismo que os orilla a comer más, porque es una forma de calmarnos”.
Otras de las enfermedades más recurrentes, sobre todo para aquellos trabajadores que se desempeñan en las áreas de obras y servicios públicos; son los males gastrointestinales.
“Al ser muy activos porque hacen trabajos externos tienen otras enfermedades, como infecciones intestinales, porque comen en la calle. Por eso son variados los malestares en el personal y, en mucho, depende del puesto para sufrir ciertas enfermedades”.
Cámara García detalló que luego de que detectara algún padecimiento tras las pruebas médicas, se contacta con el trabajador para que acuda a la clínica –localizada en las instalaciones del sindicato– para que pueda recibir tratamiento.
Sin embargo, reconoció que tan sólo la mitad de los trabajadores que han sido detectados con alguna enfermedad, continúan su tratamiento.