Javier Ortiz/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Habitantes de la comunidad de Xul-Há denunciaron la destrucción de manglar en un predio particular a un costado del balneario público. Los humedales fueron rellenados y los trozos de flora acuática sirvieron para prender fogata.

El sitio se localiza bajando hacia el balneario, donde a simple vista se pueden observar trabajos de delimitación con postes, los cuales fueron incrustados en una zona que hasta hace algunas semanas era rica en manglares, como se dio a conocer en su momento.

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Desde ese lugar se pueden observar varios metros de humedales que fueron rellenados y los pequeños troncos de los manglares arrancados y apilados a un costado. Algunos trozos incluso, fueron utilizados para encender una fogata.

A la orilla de la laguna se puede observar claramente troncos que no fueron sustraídos por completo y lucen a ras de la tierra.

Herbert Ic Rodríguez, presidente de la Unión de Cooperativas de Bacalar, destacó la necesidad de que los habitantes conformen grupos ambientalistas para la defensa de sus recursos naturales.

Señaló como ejemplo las asociaciones que se han conformado en Bacalar las cuales se dedican a evitar que se siga contaminando el ecosistema lagunar, integrando grupos de trabajo y realizando acciones concretas.

No descartó que los representantes ambientalistas de Bacalar intervengan para frenar las acciones ecocidas que particulares llevan a cabo en esa comunidad, toda vez que comparten el mismo ecosistema lagunar y porque no es la única ocasión que ocurre.

Consideró urgente la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) con oficinas en Bacalar, para que detenga la destrucción que se está llevando a cabo a orillas de la laguna.

Cabe señalar que durante la última reunión del Comité de Cuenca del Sistema Lagunar de Bacalar, la delegada de la Profepa en Quintana Roo, Catalina García Cañón, aseguró que uno de los propósitos de instalar unas oficinas en la cabecera municipal, es la de intervenir de manera inmediata en situaciones que dañen el ecosistema de la Laguna de Bacalar.