La pandemia del Covid-19 complicó el panorama para que las empresas y pequeños emprendedores puedan sobrevivir a su primer año en Quintana Roo: antes del 2020 el 27% de los nuevos negocios quebraban antes de los 12 meses. Hoy el porcentaje se encuentra en el 39%.

Los censos económicos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), así como de Data México, revelan que la inseguridad es la principal razón detrás de este cierre de más de 14 mil 890 cortinas desde el 2021, de los cuales el 94% son micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes). Pero dependiendo del tamaño del comercio o empresa pueden existir otros factores.

Por ejemplo: el 56% de las nuevas empresas con más de 251 empleados señaló que el cobro de piso y las amenazas por parte del crimen organizado fue el motivo por el que decidieron irse de la entidad desde el 2020. Antes de la pandemia solo el 23% cerró por este motivo. Quienes decidieron continuar operando mencionaron haber aumentado en casi un 8% sus gastos operativos al contratar seguridad extra.

El 30% de los medianos negocios (51 a 250 empleados) que cerraron en los últimos dos años respondieron que la delincuencia influenció en su decisión de irse. Mientras que el 40% de las micro y pequeñas unidades económicas, con dos y hasta 50 trabajadores, mencionó haber perdido la batalla y su inversión contra las organizaciones criminales.

Cámaras empresariales locales han señalado en varias ocasiones que los carteles incrementaron la cantidad de dinero que exigen como “derecho de piso” o extorsiones desde la llegada del Covid-19, así como también aumentaron los ataques contra los negocios que no accedían a este “pago”.

El 22% y el 27% de las micro y medianas empresas detallaron que los altos impuestos que se impusieron desde el 2020 hicieron insostenible su emprendimiento, por lo que decidieron mejor abandonarlo. Las empresas grandes, por su parte, explicaron que no tuvieron tanto problema con esto, aunque sí el exceso de trámites gubernamentales, clausuras, multas y sanciones, así como falta de estímulos fiscales para operar en el Caribe Mexicano hicieron que mejor agarraran sus maletas y decidieran mudarse en el 17% de las ocasiones.

El 18% de las unidades económicas con menos de 10 empleados, la mayoría dedicados al comercio al por menor o prestación de servicios varios, refirieron que desde la pandemia del Covid-19 enfrentan un grave problema de competencia desleal, debido a que la informalidad de su mismo giro o actividades creció en casi el triple en los últimos dos años, provocando una saturación del mercado que no lograron superar al no ofrecer precios competitivos.

De esta forma, aunque Quintana Roo se mantiene en el top 5 de las entidades con mayor crecimiento de empresas, también se ubica entre las primeras siete con mayor índice de “muerte de emprendimientos” a nivel nacional.